A Lurte renueva la cartogafría del entorno de Canfranc
Se prevé que refuerce la seguridad, junto a los cursos y los boletines de aludes
CANFRANC.- El centro A Lurte, de Canfranc Estación, se propone mejorar la seguridad de los asistentes a la montaña invernal, detallando las zonas donde hay más riesgo de avalanchas, a través de una nueva cartografía del entorno, que les puede resultar de ayuda tanto a los usuarios de las estaciones de esquí de Astún y Candanchú, que abren mañana, como a montañeros, escaladores y otros excursionistas.
“Con esta completa renovación de la cartografía -que se puede consultar en la web del centro-; los boletines de peligro de aludes, que se van a seguir emitiendo tres veces a la semana (lunes, miércoles y viernes) y los cursos de formación que vamos a continuar impartiendo, estamos ofreciendo todas las herramientas para disfrutar de la montaña con calidad y con seguridad, sabiendo que nunca existe el riesgo cero”, manifestó ayer el alcalde, Fernando Sánchez, al presentar la nueva temporada de A Lurte.“Tenemos que concienciarnos de que el Pirineo no es un parque de atracciones y que conlleva riesgos. Cuando salimos al monte, lo más importante es volver”, continuó el primer edil, haciendo hincapié en que los boletines de aludes, que se retomaron ayer, “son locales y hechos sobre el terreno”, por lo que “en ese sentido son mejores” que los genéricos que ofrece la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Además, recordó que el Gobierno de Aragón cuenta con 4,5 millones de fondos europeos para restaurar los diques que protegen Canfranc. “Es importante el mantenimiento de las defensas para estar seguros”, declaró el alcalde, que cree que en la primavera de 2023 empezarán estas mejoras, que constituyen la actuación de mayor envergadura desde la colocación de los diques, hace un siglo.
Iván González, geólogo y encargado de hacer los boletines, quiso aclarar que “la cartografía es una herramienta de planificación que ayuda a preparar las salidas, pero por sí sola no indica el riesgo de aludes o la seguridad de la ruta”. Desde A Lurte se sigue la clasificación Ates (desarrollada por Parks Canadá), que distingue tres tipos de terreno: simple, exigente y complejo, que aparecen en verde, azul y rojo en el mapa que se puede ver en la web. Además, se incluyen unas líneas rojas que señalan las zonas donde son más probables las avalanchas.
Su impresión es que “en la montaña cada vez hay más usuarios y también mayor formación”. “Vamos avanzando, pero poco a poco”, aseguró el especialista, adelantando que durante la temporada 22-23 se van a ofrecer “entre 6 y 8 cursos”, con la Asociación para el Conocimiento de la Nieve y los Aludes (Acna). Por su parte, Álex Varela, de la empresa Pyrene Visuals, que se encarga de desarrollar la parte expositiva de A Lurte, anunció que se incorpora una visita virtual sobre las obras que se realizaron hace un siglo para proteger el entorno. “La idea es mostrar todo el trabajo que se hizo para que la gente lo conozca”, dijo, y agregó que “el público podrá ver 20 puntos a través de una pantalla táctil”. ●