Hacia la integración plena
LA COORDINADORA de Asociaciones de Personas con Discapacidad (Cadis) puso ayer el foco especialmente sobre la especial vulnerabilidad de las mujeres con discapacidad. Es algo así como una doble discriminación por el hecho de tener una discapacidad y de ser mujer, por ejemplo, a la hora de encontrar un puesto de trabajo para conseguir la integración laboral. Este es uno de los objetivos de las entidades que componen la coordinadora, puesto que la igualdad plena no se conseguirá mientras no se avance en crear oportunidades de lograr un empleo para las personas vulnerables.
La gerente de Cadis, Marta Peña, puso también el acento en la “especial vulnerabilidad” de las mujeres con discapacidad frente a la violencia de género. Por si esa lacra de la que ninguna mujer queda excluida, no fuera lo suficientemente grave para el conjunto de la sociedad, se ceba también con este colectivo, que tiene más dificultades en ocasiones para su defensa y así se ha puesto de manifiesto recientemente en algún caso ocurrido no muy lejos de aquí.
El tono reivindicativo siempre aparece en este acto, porque no se puede dejar de aspirar a mejoras, especialmente cuando aún hay aspectos como la formación y la integración laboral en los que todavía hay muchas carencias. Muchas entidades de Huesca han sido pioneras y ejemplo en muchas prácticas y programas para avanzar en este sentido, y no se puede perder esa posición en la línea de salida. Pero para ello es fundamental la unión de toda la sociedad, con las instituciones y otros agentes sociales, para encontrar esas oportunidades de avanzar hacia una Huesca más inclusiva y, por supuesto, hacia una igualdad real.