ROSA VILLACASTÍN
‘‘He sido testigo de cómo la música tiene poderes sanadores’’
LUIS FONSI
Pocos podían pensar, ni siquiera su autor, el cantante Luis Fonsi, que “Despacito” se convertiría no sólo en la canción número uno en más de cuarenta países, sino en la más escuchada de YouTube, con cinco mil millones de reproducciones. Un éxito sin precedentes que le ha convertido en el máximo exponente de la música hispana.
Fonsi nos recibió en Marbella, donde acudió para recoger de manos de María Bravo el Premio a la Solidaridad que cada año otorga la Fundación Global Gift. Con María visitó hace unos semanas un orfanato en Vietnam, lo que según nos confesó le causó un gran impacto, como todo lo que tiene que ver con la infancia. Muy implicado en obras sociales, el cantante puertorriqueño es un hombre cercano y amable, locamente enamorado de la modelo española Águeda López, con la que tiene dos hijos, Mikaela y Rocco.
-Luis, ¿qué significa para usted recibir el Premio Gobal Gift Philanthropist a su labor solidaria?
-Es un verdadero honor y me siento muy agradecido, sobre todo porque podemos continuar creando conciencia, tan importante en estos momentos. Por años he sabido de la labor llevada a cabo por Global Gift Foundation, pero fue cuando conocí a María Bravo el año pasado cuando decidí que debía colaborar con ella en proyectos muy especiales, que por siempre tendré en mi corazón.
-¿Quién le inculcó el deseo de ayudar a mujeres y niños necesitados?
-Para mí, participar en causas benéficas ha sido siempre una prioridad. Ayudar a los más necesitados es algo que me inculcaron mis padres desde muy pequeño. Y gracias a mi carrera como cantante, he tenido y tengo el privilegio de llevar alrededor del mundo mensajes de solidaridad a todas aquellas personas que lo necesitan. Usar mi voz para una buena causa es algo que me llena y que deseo hacer el resto de mi vida.
-Su país de origen, Puerto Rico, quedó devastado tras el huracán María. ¿No serían los gobiernos los que deberían atender a los damnificados?
-Sí, pero todos sabemos que muchas veces la ayuda no llega tan rápido como se necesita. Cuando suceden este tipo de desastres, no hay tiempo que perder, muchas vidas dependen de una ayuda inmediata. Es muy importante que como ciudadanos unamos nuestras fuerzas para no sólo ejercer presión sobre los gobiernos, también debemos usar nuestros propios recursos para ayudar a mejorar la situación. Es imposible ayudar a cientos de miles de personas, sobre todo en tiempo de crisis, pero con que aportemos todos un granito de arena podemos lograr mucho.
-En los momentos de grandes catástrofes, los famosos son los primeros en dar un paso al frente, ¿por qué?
-Por lo que mencionaba anteriormente, porque gracias a nuestras carreras no sólo podemos entretener a través de nuestro arte, también podemos usar nuestra voz para comunicarnos con muchas personas a la vez y crear conciencia de lo que está pasando. Eso es un poder que no debe ser malgastado. Antes de ser artistas, somos humanos y ciudadanos del mundo y tenemos el deber de ayudar al prójimo.
-Ha visitado con María Bravo el orfanato Quang Chau, en Vietnam, ¿qué es lo que más le ha sorprendido de lo que ha visto?
-Lo primero que sientes al entrar a un orfanato en cualquier parte del mundo es querer ayudar y abrazar a cada uno de esos niños, sacarles una sonrisa, jugar y compartir tiempo con ellos… Lo interesante en este caso es que nos separaba el idioma, ellos no enten-
“Usar mi voz para una buena causa es algo que me llena y que deseo hacer el resto de mi vida”
dían español o inglés, y yo no les entendía a ellos. Sin embargo, nos comunicamos con las miradas y esos abrazos que hicieron de esta visita una vivencia única e inolvidable.
-¿Cuál fue el motivo de la visita?
-Entregarles productos básicos y ver sus caritas de felicidad y el agradecimiento que sentían: fue una experiencia muy bonita con una Fundación, la Global Gift, con la que pienso seguir involucrado, además de con los proyectos de mi Fundación Luis Fonsi.
-¿La pobreza infantil tiene el mismo rostro en todas las partes del mundo?
-Es algo a lo que me cuesta responder honestamente porque ningún niño debería sufrir de estas injusticias. Tenemos mucho trabajo por hacer.
-¿Se animará a escribir alguna canción sobre estos temas?
-Claro que sí, haré todo lo que pueda ayudar a la causa. Algunas de mis canciones, como “No me doy por vencido”, tienen ese significado en la letra y he sido testigo de cómo la música es poderosa sanadora.
-Dígame: ¿qué tiene “Despacito” que no tengan sus otras canciones?
-Desde el primer momento en el que me vino a la mente “Despacito” sabía que quería rendirle homenaje a mi isla de Puerto Rico y que cuando la gente la escuchara sintiera como si estuviese de vacaciones, bailando y disfrutando de la vida. Quizás fue eso lo que hizo que se convirtiera en lo que es hoy en día. Es lo que necesitaba el mundo en ese momento, y no puedo estar más agradecido.
-¿Soñó que se convertiría en el tema más reproducido de la historia?
-Todo artista sueña con que su canción sea todo un éxito y sí sabía que tenía algo muy especial en mis manos, pero jamás me imaginé todo lo que la canción ha logrado desde su lanzamiento.
-Usted encarna el sueño americano, ¿cree que las políticas migratorias actuales ponen en peligro ese sueño?
-Es tan doloroso este tema que es difícil de procesar. Creo que lamentablemente nos hemos olvidado del criterio fundamental de los Derechos Humanos, todo recae en esto. Todos los días nos enfrentamos a tanta injusticia, no sólo con lo que mencionas, también al racismo, la homofobia, el odio, entre otras cosas, y lo único esperanzador es que la comunidad se ha unido más y no se rinde. Como ciudadanos, tenemos la responsabilidad de dejarles a nuestros hijos un lugar mejor y un futuro lleno de oportunidades. Tenemos mucho que hacer para lograrlo, pero no es imposible.
-Supongo que la vida le habrá cambiado mucho en el último año, en lo profesional pero también en lo personal.
-En lo profesional, “Despacito” me ha abierto muchas puertas, sobre todo a que mi música haya llegado a lugares por primera vez; a que pueda tocar en países donde no se hable el español; a lograr un récord increíble que sólo otras dos canciones en español (“La Bamba” y “Macarena”) habían podido alcanzar en 40 años. Pero dentro de toda la locura que ha sido, en el buen sentido de la palabra, sigo siendo el mismo artista que se levanta a trabajar todos los días como lo he hecho durante estos 20 años de carrera. Mi plan es continuar trabajando duro para seguir llevando nuestra música, raíces y cultura por todo lo alto.
-¿Y en lo personal?
-El trabajo me mantiene semanas fuera de casa y alejado de mi familia y es lo más difícil para mí. Pero mi esposa y yo hemos podido crear un sistema que funciona. Muchas veces me acompaña a los países donde me estoy presentando y, cuando no, nos comunicamos muchas veces al día a través de Facetime.
-¿Qué recuerdos guarda de su infancia en Puerto Rico?
-Nací y me crié en Puerto Rico hasta los 10 años y luego me mudé a Estados Unidos, pero mis costumbres, mi todo, está completamente ligado a mis raíces.
-Los sabores y los olores de nuestra infancia nos marcan: ¿cuáles son los suyos?
-El olor de la comida puertorriqueña me lleva a casa aunque me encuentre a miles de millas de allí.
-Llegó a Florida con 10 años y no sabía inglés, ¿qué recuerda de esos primeros años?
-No te voy a mentir, fue difícil para mí porque parte de mi familia y mis amigos se quedaron en la isla, todo lo que conocía y que era mi entorno diario ya no existía en Orlando. Me costó un poco al principio, pero luego empecé a apreciar el poder vivir ambas culturas. Esa experiencia me convirtió en el hombre que soy hoy en día.
-¿Qué le enseñaron sus padres que no ha olvidado?
-Mis padres son una de mis mayores bendiciones, soy quien soy gracias a ellos, y entre muchas de las cosas que me enseñaron, me dijeron una frase que me ha marcado durante todos estos años: “Tocar el cielo sin levantar los pies del suelo”.
-¿Qué les inculca a sus hijos?
-El valor de la familia, ser buenos hermanos y respetar a los mayores. A defenderse por sí mismos y luchar por sus sueños. Quiero criarlos de la misma manera que mis padres hicieron conmigo.
-¿Le gustaría que alguno de ellos siguiera sus pasos?
-Si es algo que desean y están dispuestos a trabajar por ello, claro que sí. Yo les apoyo en lo que ellos quieran hacer.
-Está casado con la modelo española Águeda López, ¿cuál es el balance de su relación?
-Amor y familia.
-Acaba de cumplir 40 años, ¿le preocupa el paso del tiempo?
-Trato de vivir el presente y no llenar mi mente con cosas que no puedo controlar. Tengo mil preocupaciones, pero ninguna a la que le quiera dar importancia para que no me robe mi día a día. Pero todavía no he notado que he llegado a los cuarenta