Duelo de tiaras en los Premios Nobel

Despliegue de joyas de la Casa Real sueca en la ceremonia de entrega de los Premios Nobel: Victoria arriesgó con un vestido negro acolchado, mientras Magdalena y Sofía triunfaron con sus looks, en rosa fucsia y azul. La reina Silvia fue la más elegante de la gala.

DESFILE DE ALTA COSTURA EN LA CENA GALA DE ESTOCOLMO

Las mujeres de Casa Bernadotte sueca lucieron joyas y tiaras en un despliegue total de glamour, con motivo de la gala de los Nobel, que se celebró el martes 10.

La doble ceremonia de los prestigiosos galardones tuvo dos escenarios: Estocolmo y Oslo. En la capital sueca, la Sala de Conciertos acogió la entrega de las distinciones en la mayoría de las categorías, es decir Física, Química, Medicina y Economía. Este año el compromiso con el medio ambiente fue uno de las grandes protagonistas: el físico Michael Mayor, uno de los distinguidos en su campo, centró su discurso en el Calentamiento Global:

“No tenemos Plan B, tenemos que cuidar de la Tierra. Si llega un punto en que se vuelve inhabitable, no hay salida. Estamos vinculados a este planeta.”

Como marca la tradición desde 1934, la ceremonia dio paso al tradicional banquete, que fue presidido por los Reyes, Carlos XVI Gustavo y Silvia. El salón Azul del Ayuntamiento de Estocolmo albergó la cena de gala, con un menú de platos típicos escandinavos. La heredera Victoria acaparó todas las miradas. Su tiara, la imponente Baden Fringe de 47 diamantes, quedó eclipsada por un vestido de Selam Fessahaye, en blanco y negro, acolchado y con un exceso de volúmenes en mangas.

HAAKON Y METTEMARIT, MÁS ENAMORADOS QUE NUNCA

El diseño, arriesgado y poco acertado, no recibió buena acogida. Magdalena y Sofía, se llevaron las mejores críticas de la noche. Sus vestidos, más minimalistas y en tonos lisos, triunfaron. La benjamina de los Reyes, que voló desde Miami, donde reside con su marido, Chris O'Neill, asistió sola a la gala. Magdalena optó por una creación del venezolano Ángel Sánchez en rosa fucsia, mientras su cuñada, la mujer de Carlos Felipe, se decantó por un turquesa, obra de Emelie Janrell.

La mujer del heredero al trono de Noruega estrenó un vestido de Pia Tjelta

Ese mismo día, en la sede del Ayuntamiento de Oslo (Noruega), se hacía entrega del Premio Nobel de la Paz, que recayó en Abiy Ahmed Ali, primer ministro de Etiopía desde 2018. Presidieron el acto los Monarcas Harald y Sonia de Noruega, acompañados por el Heredero Haakon y su mujer, Mette-Marit. Para la princesa suponía su primera aparición en acto oficial tras pedir perdón después de que su nombre saliera a luz por su relación con Jeffrey Epstein (el fallecido magnate condenado por pedofilia y amigo del príncipe Andrés). Mette-Marit y Haakon, que han cumplido 18 años de matrimonio, se mostraron de lo más cómplices y enamorados. La Princesa, que ha reducido sus intervenciones debido a la fibrosis pulmonar que padece, recicló para la ocasión un abrigo con vestido a juego de Valentino en color beige y una diadema de Prada.

Para la cena posterior, cuya etiqueta era pajarita negra en invitados y de largo en invitadas, Mette Marit estrenó un vestido con pedrería de la noruega Pia Tjelta.

La reina Silvia, con la tiara de las Nueve Puntas creada con diamantes. Magdalena llevó la tiara Kokoshnik, con cinco aguamarinas engarzadas en diamantes. La heredera, con la impresionante tiara Baden Fringe, con 47 diamantes con figuras romboides. La pieza pertenece a la familia desde 1881.

Sofía, con la tiara que le regalaron sus suegros en su boda. La pieza lleva turquesas a juego con el azul del vestido. El escote del vestido de Sofía, de Emelie Janrell, dejaba ver su tatuaje en forma de sol. Junto a ella, su cuñada Magdalena.

Elegantísima, Silvia de Suecia, con un vestido joya de Elie Saab en color maquillaje, con Carl-Henrik Heldin, Nobel de Física y presidente de la Fundación Nobel. Magdalena lució un palabra de honor, creación de Ángel Sánchez. Junto a ella, el Nobel en Medicina William Kaelin Jr. El Rey Carlos XVI Gustavo y Evy Heldin, de la Fundación Nobel. El príncipe Carlos Felipe y la premio Nobel de Economía, Esther Duflot.

El vestido de Victoria, de Selam Fessahaye, demasiado recargado en volúmenes y mangas abullonadas XXL. Le acompaña el Nobel de Física, Michael Mayor. El príncipe Daniel y la Nobel de Literatura, la escritora polaca Olga Tokarczuk. Sofía eligió un impecable diseño de la sueca Emelie Janrell en azul turquesa, con escote “offthe-shoulder”. Junto a ella, Didier Queloz, Nobel de Física.

Haakon y su mujer, que lució un vestido de la noruega Pia Tjelta, con pedrería y mangas abullonadas.

Haakon y Mette-Marit de la mano, en el Gran Hotel de Oslo, donde se sirvió la cena en honor al Premio Nobel de la Paz. La ceremonia de Oslo es menos formal que la de Estocolmo. Aquí, lanto la Reina como su nuera lucieron looks reciclados: Sonia, un traje en rojo y negro de Emilio Pucci; y MetteMarit, de Valentino. Harald y Sonia, que se decantó por un “total red” con volantes del diseñador noruego Peter Dundas para la firma Dundas.