Josep María Mainat: “Ha sido mi mujer, ha querido matarme”
El caso Mainat crece cada día, con giros de guión y la aparición de nuevos personajes que dejan muchos interrogantes en esta historia. Todo comenzó cuando el periódico “La Vanguardia” destapó que la mujer de Josep María Mainat, ex miembro de La Trinca y fundador de la productora Gestmusic, estaba siendo investigada por intentar asesinarle. ¿El motivo? Según la noticia, Angela Dobrowolski, de 37 años, se metió en el correo personal de Mainat y descubrió que éste había iniciado ya los trámites de divorcio. En los documentos se especificaba que si el matrimonio se divorciaba, ella quedaba excluida del testamento, no tendría acceso a una futura herencia millonaria. La mujer, que está cursando el último año de Medicina, fue detenida el pasado mes de junio. La policía halló indicios de que intentó matar al productor, que es diabético, suministrándole insulina mientras dormía.
Los hechos sucedieron la madrugada del 22 al 23 de junio. La pareja ya no convivía, pero Angela acudió al domicilio de Mainat para cenar en familia con los dos hijos de la pareja. La noche se alargó y ella se quedó a dormir en otro cuarto de la casa. Sin embargo, las cinco cámaras de videovigilancia que están repartidas por el domicilio, captaron cómo durante la noche, Dobrowolski entró hasta trece veces en el dormitorio de su ex. Consciente de que la estaban grabando, la mujer se escondió detrás de la puerta de la nevera para, presuntamente, preparar las dosis que iba a suministrarle a su esposo. Según el atestado, la mujer aprovechó que Mainat estaba dormido para entrar en su habitación y ponerle las inyecciones.
El productor intentó negarse, pero no ofreció resistencia al estar profundamente dormido. Los Mossos, además, descubrieron otro elemento clave para inculpar a Angela. La mujer de Mainat utilizó hasta cinco veces un glucómetro, aparato que mide el nivel de azúcar, sin saber que esas mediciones quedaban registradas. Los niveles del productor bajaron hasta tal punto que había riesgo de muerte, pero la mujer no hizo nada, simplemente esperó...
La delató el glucómetro
Vei nte minutos después llamó a una ambulancia y mintió a la telefonista que le atendió. Le dijo que no tenía azúcar en casa para revertir el estado de su marido. Después, supuestamente, cogió el glucómetro y se midió ella misma el azúcar para hacer ver que los niveles de su marido eran correctos y que no indicaban que corriera peligro. Mainat fue ingresado en el hospital y entró en estado de coma. Se recuperó dos días después y fue su hijo mayor, Pol, fruto de su matrimonio con Rosa María Sardá, el que decidió interponer la denuncia en comisaría.
Según desvela “La Vanguardia”, Mainat fue consciente de lo que tramaba su ex en cuanto le metieron en la ambulancia. Así se lo hizo saber a la cuidadora de sus hijos, que acababa de llegar al domicilio. “Ha sido ella, ha querido matarme”, le susurró señalando a Dobrowolski. En su declaración ante los Mossos, la niñera relató después que Angela cogió las pruebas que presuntamente la incriminaban y luego salió a la calle para deshacerse de ellas.
La Fiscalía solicitó en agosto el ingreso en prisión provisional de Angela, pero el juez lo descartó. La mujer ha quedado en libertad con cargos y sin fianza acusada de un delito de tentativa de asesinato y con la obligación de presentarse en el juzgado cada semana.
Falsificó dos cheques
A pesar de saber que estaba siendo investigada, la ex mujer de Mainat fue detenida de nuevo el pasado 21 de septiembre por cobrar dos cheques falsificados del talonario de su marido. Supuestamente, Angela imitó la firma de Mainat poniendo a su hermana como beneficiaria para enmascarar la estafa. En total retiró 4.100 euros. En una de las visitas al banco, la mujer se puso unas gafas y una gorra para que no la identificaran y así poder cobrar los cheques. El juez, el mismo que investiga el intento de asesinato del productor, volvió a decretar su libertad al considerar que no había riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas.
Angela, alemana de nacimiento, y Josep María Mainat, se casaron en 2012. Ella es 35 años menor, pero la diferencia de edad nunca fue un impedimento. El productor y su mujer tienen dos hijos, Jana, de ocho años, y Joan Ramon, de cuatro. La pareja comenzó a tener problemas en su matrimonio y a principios de año decidió separarse. A pesar de su ruptura de hecho, el productor y su ex solían compartir tiempo juntos por el bien de sus pequeños. El productor ha evitado pronunciarse, aunque escribió a Chelo García Cortés: “Estoy bien, la investigación sigue su curso”.
ANGELA ESTÁ EN LIBERTAD CON CARGOS Y SIN FIANZA. MAINAT ASEGURA: “ESTOY BIEN. LA INVESTIGACIÓN SIGUE”
Angela tampoco ha querido dar su versión de los hechos, aunque en su declaración policial asegura que no se estaba separando de Mainat. Ella insiste en su inocencia y afirma que lo que le pinchó fueron vitaminas y un tratamiento adelgazante. Lo cierto es que quedan muchos interrogantes en el aire. ¿Por qué la pareja siguió conviviendo en la casa después del supuesto intento de asesinato? “Aquí hay cosas que no cuadran. Los dos nos están ocultando información”, aseguró la periodista de sucesos Cruz Morcillo.
Mainat contrató seguridad privada y dejó la casa conyugal hace más de un mes, cuando pilló a su mujer falsificando sus cheques y fue detenida por. ello. Al cierre de esta edición, la alemana continuaba en la vivienda, aunque existe una orden judicial para que abandone la propiedad.
El amante de Angela
Cuando la prensa se acercó a casa de Mainat el viernes 2 de octubre, entró en escena Alina, una mujer rusa que aseguró haber permanecido en esa vivienda durante quince días. La chica aporreaba la puerta exigiendo sus maletas a Gabriel, su ex novio, al que ella denominó “escort latino”, contratado, supuestamente, por la mujer de Mainat. La tensión llegó a tal punto que uno de los reporteros de “Ya es mediodía” tuvo que llamar a la Policía después de que la rusa fuese agredida por el propio Gabriel y empujada por él hacia el interior de la casa. La guardia urbana le detuvo por violencia de género y el sábado ambos tuvieron que declarar ante el juez. Ese mismo día, sin embargo, Alina se sentó en el “Deluxe” para seguir alimentando el culebrón
SEGÚN EXPLICÓ ALINA, ANGELA QUERÍA TENDERLE UNA TRAMPA A POL, EL HIJO MAYOR DE MAINAT: “BUSCABA QUITÁRSELO DE ENCIMA”
del otoño. La rusa, astróloga de profesión, aseguró que las intenciones de Angela eran convertir la casa de Mainat en un prostíbulo para conseguir dinero. “A Gabriel le pagaba entre 3.000 y 5.000 euros al mes”, explicó. Alina la definió como “una persona muy agresiva”. También aseguró que Angela quería tenderle una trampa a Pol, el hijo de Mainat: “Buscaba quitárselo de encima. Ella quería yo que lo sedujese y que le llevara a un hotel. Luego aparecería ella para provocar que Pol la pegase”. Está claro que esta historia contará con más capítulos.