Ingrid García Jonsson: “A mí tampoco me gusta dar besos”
Es una actriz atípica y que se mueve fuera de los focos con mucho sentido del humor. Ahora protagoniza “Explota explota”.
Por sus venas corre sangre sueca y sevillana. Ingrid García-Jonsson es divertida, ingeniosa y vive su profesión con pasión, pero con bastante naturalidad. Ahora está en los cines con “Explota explota”, una película que le permitió conocer a Raffaella Carrà.
-¿Habías cantado antes? -Había dado clases, pero cantar como Raffaella es muy difícil. Ella no canta, grita y entona. Llega a unas notas muy altas.
-¿Cómo fue conocerla? -Fue muy inspirador porque es una mujer muy consecuente. Estuve con ella dos horas y lo que muestra como artista y lo que muestra como persona es lo mismo. Ella siempre tiene buen humor.
-¿Es una diva?
-No, para nada. Es muy trabajadora. Nos hicimos todos fotos con ella, y llegó un momento que lo zanjó diciendo: “Bueno se acabó, que esta gente tiene que trabajar y yo vivir”. No es una diva de las que te mira por encima del hombro. Eso sí, no le gusta dar besos, te da la mano. Cosa que agradezco, porque a mí tampoco me gusta.
-¿Qué canción de ella te ha marcado la vida?
-Ahora me paso todo el día cantando. La que más me gusta bailar de fiesta es la de “Para hacer el amor hay que venir al Sur”.
-¿Cómo ha cambiado tu vida la pandemia?
-He aprendido a valorar a la gente que tengo alrededor, y que la familia y los amigos son muy necesarios. Tengo suerte de contar con gente tan guay cerca. Suena mal, pero el trabajo no es lo primero. Sé perfectamente que me podría dedicar a otra cosa. Ahora tengo menos apego por la profesión.
-¿Qué proyectos tienes? -Tengo un par de estrenos pendientes y me voy fuera de España a rodar una película. Estoy feliz de tener esta oportunidad, pero no puedo contar nada. La gente está empeñada en que no paro de trabajar, pero la verdad es que sólo tengo un proyecto.