“CUANDO ERES JOVEN, TE SIENTES ATRAÍDA POR TIPOS DUROS, PERO ES SÓLO UNA FANTASÍA. EL PLACER ESTÁ EN LA BONDAD Y EL SENTIDO DEL HUMOR”
Con su primer marido, el maquillador Ron Snyder, se casó en 1980 y terminó divorciándose nueve años después. Durante este tiempo, mantuvieron una relación muy abierta en la que, según Ron, ambos tenían historias por su cuenta, él con ex novias y ella con directores y compañeros de rodaje, pero nada serio. Sólo Jon Peters, productor de “Batman”, película en la que Kim trabajó, hizo que dejara definitivamente a Snyder. Pero a Peters también le fue infiel con el cantante Prince, al que estuvo muy unida. De hecho, además de vivir juntos, el mítico artista llegó a convencerla para que grabase un disco, pero las dotes musicales de Kim no estaban a la altura de lo esperado y todo quedó en una anécdota.
Alec Baldwin, una relación problemática
Después de romper con Prince, en 1990 conoció al también actor Alec Baldwin, con el que quedó para cenar en un restaurante de Los Ángeles y charlar sobre la película que iban a protagonizar juntos: “Ella siempre dice sí”. La química entre ellos era tal que no les importaba mantener r el aciones s exuales con poca discreción y mucho ruido, tanto, que muchos miembros del equipo podían escucharlos. Una pasión que vivían también en sus acaloradas discusiones y que terminó por cansar a todos los compañeros. El rodaje fue un infierno, pero a Kim y a Alec pareció no importarles demasiado y decidieron darse el “sí, quiero” en agosto de 1993. Su hija, Ireland, nació dos años después y Kim dejó de trabajar para centrarse en la maternidad. Su matrimonio iba de mal en peor y Alec, con problemas para gestionar sus ataques de ira, tuvo que ponerse en manos de especialistas. De nada sirvió, porque la pareja terminó separándose en el año 2001, a la vez que se enzarzaban en una batalla legal, que duró años, por la custodia de su hija.
En una entrevista , Kim confesaba cuál podría ser el motivo de sus fracasados romances: “Cuando eres joven, te sientes atraída por tipos duros, pero es sólo una fantasía. El placer está en la bondad y el sentido del humor”. Por fortuna, la actriz parece haber encontrado la estabilidad emocional junto al estilista Mitch Stone, con el que vive feliz desde hace seis años.
Guadalupe Grande