ONCE AÑOS DE AMOR
El pasado mes de marzo, la pareja anunciaba en redes sociales su separación matrimonial tras más de una década de relación y dos hijos en común, Lucas y Martín. Un divorcio que ha resultado de mutuo acuerdo y sin grandes problemas entre ellos. Sara tiene la custodia de los pequeños mientras Iker se ocupa de los gastos de su educación y goza de un flexible régimen de visitas. De hecho, la pareja ha decidido vivir muy cerca para que ambos puedan estar con los niños y llevarles al colegio.