La Voz de Galicia (Santiago) - El Comarcal Santiago
Las Brañas de Laíño, un espacio por descubrir
El río Ulla forma en Dodro uno de los espacios húmedos de mayor valor medioambiental de Europa: las Brañas de Laíño. Integradas en la Rede Natura 2000, constituyen una joya natural única junto al Ulla, que se extiende desde Lestrove hasta Bexo. No existe una ruta señalizada como tal, pero sí un recorrido de catorce kilómetros que impulsa el Ayuntamiento de Dodro y que toca pistas asfaltadas y senderos verdes, estos últimos próximos al cauce del río que, en las Brañas de Laíño, muestra toda su grandiosidad.
La zona no está preparada como lugar turístico ni suele ser muy conocida fuera de la comarca, pero bien merece una visita y un paseo. La ruta, incluida por el Concello en el programa Goza do Ulla, que recorremos acompañados del técnico municipal de Deportes, Fernando González, arranca en el pazo de Lestrove, uno de los elementos patrimoniales más destacados de Dodro. La caminata permite recorrer y, en algunos tramos adentrarse, la zona verde de las Brañas para admirar su quietud y belleza aunque también lamentar el abandono al que ha llegado, de modo que hay zonas que parecen una selva, tal y como lo califican algunos vecinos.
Y es que parte de las tierras del espacio que está considerado como uno de los humedales más importantes, con gran valor ecológico y en las que anida la especie escribenta das canaveiras, en peligro de extinción, fueron en su día campos que trabajaban los vecinos pero, tras el deslinde efectuado por Costas en torno al año 1998, pasaron a ser de dominio público y el abandono es total, de modo que en las mismas crecen todo tipo de vegetación hasta el punto de que, desde hace unos años, son refugio de los jabalíes. Incluso así, quedan par
celas en las que se trabaja el cultivo del maíz. La ruta depara varios puntos para acercarse al río Ulla, como la conocida zona del Areal, a la altura de Revixós.
En ese recorrido, árboles de ribera y mucha espadaña y juncos que crecen en un espacio encharcado. El paseo se presta para que lo pueda recorrer cualquier persona, ya que se trata de un itinerario totalmente llano. A la par que se camina por las Brañas, se puede ir viendo, además, los distintos núcleos de la parte baja de Dodro.