La Voz de Galicia (Santiago) - El Comarcal Santiago
En la ruta de Fisterra aspiran a cubrir gastos
La dispersión geográfica es la baza para crecer en reservas nacionales en la prologanción del Camino
El 1 de julio marcará un punto de inflexión en el Camiño para este 2020 porque será cuando se reactiven las distintas rutas con sus albergues y otros servicios. Y existe «optimismo» entre los empresarios consultados, que creen que ya se han perdido tres meses importantes como abril, mayo y junio, por lo que esperan una temporada «para cubrir gastos» y salir lo menos tocados posibles. La mayoría confían en que primero se empiecen a mover los peregrinos nacionales y que después lleguen los internacionales, porque en el Camino de Fisterra e Muxía, más de un cincuenta por ciento lo son extranjeros.
Manuel Fernández, de los albergues Alto da Pena y Rectoral San Mamede da Pena (tiene otro más en Santiago), afirma que hace tres semanas comenzaron a moverse las reservas: «No noso caso, no albergue da Rectoral temos habitacións que fan as veces de turismo rural, polo que chámanos xente para reservas. Nos dixeron dende Zaragoza que nos fósemos preparando, que a xente quere viaxar polo Norte», apunta. En su caso, las primeras reservas son de gente de Madrid para el 27 de junio.
El alojamiento con mayor capacidad de Negreira, el hotel Millán, sufrió una masiva cancelación de reservas: «Tiñamos prácticamente cuberto de marzo a novembro, sobre todo con grupos, e quedamos moi tocados», afirma José Millán, que salvo reservas para agosto a nivel familiar, «de peregrinos, pouco, e de grupos, non queren vir porque non nos deixan ter actuacións musicais na terraza porque o Concello non me dá permiso e as forzas da orde múltannos». Se queja de la falta de apoyo e interés.
Francisco Rial, del restaurante Casa Barqueiro, asume que será un verano muy irregular. «Agardamos que o peregrino nacional axude a remontar algo en xullo e agosto, porque as expectativas son malas, aparte do recorte de aforo», y aseura conformarse con cubrir gastos.
En pleno centro de Negreira, en el albergue El Carmen ni siquiera saben si abrirán el 1 de julio: «As reservas que tiñamos do albergue están todas anuladas e en xullo non temos ningunha. O que temos é reservas para as habitacións do hostal, todas españolas, e algunhas, as menos, extranxeiras», dice María del Carmen, su dueña. En el albergue O Rueiro, que cuenta con restaurante, en Vilaserío, dice Jesús Puñal que no abrirán hasta el 1 de julio y que lo fuerte será el peregrino nacional.