La Voz de Galicia (Santiago) - El Comarcal Santiago
El siglo XIX está en buenas manos
Alumnos del CEIP Camiño Inglés seguirán siendo guías de «Espazo Pendeloque»
[C. MARTÍNEZ] El origen de «Espazo Pendeloque» se remonta a una buena relación entre el historiador Manuel Pazos y el centro CEIP Plurilingüe Camiño Inglés. La exposición pretende exhibir el patrimonio social y cultural de Oroso, y es fruto de un trabajo colaborativo entre el centro educativo, el Concello y las familias.
Todo empezó el curso pasado, bajo el «proxecto Pendeloque». Todos los lunes, el alumnado de sexto de Primaria recibía a Manuel, que traía y exponía algunas de sus piezas a los jóvenes. «Tratábase de seguir a liña de identidade do noso centro co Camiño», comenta Francisco Ávila, director del colegio. Según sus palabras, «a maior parte dos nenos e nenas, como a maioría de nós, non son de Oroso, polo que nos parecía importante dar a coñecer a historia do noso concello».
Gracias a las aportaciones de Manuel y las familias, se recaudaron alrededor de cuatrocientas piezas que dieron lugar a esta muestra etnográfica, arqueológica y fotográfica. En ella incluso se recoge un apartado dedicado al centenario del descubrimiento del Tesouro de Recouso, y piezas cedidas por el Museo Pedagóxico de Galicia que ayudaron a recrear una escuela de los años cincuenta y sesenta del pasado siglo.
También hubo contribuciones individuales. El vecino de Oroso
Modesto Vázquez cedió un coche, dos motocicletas y un sidecar, que «tiñamos expostos no propio colexio e aos rapaces encantáronlles», comenta el director.
Durante este tiempo, fue el propio alumnado de sexto de Primaria el encargado de mostrar la exposición a todos aquellos que estuvieran interesados en verla. «Nos recreos miraban as solicitudes de citas para ver a mostra e eles mesmos chamaban para quedar coa xente», explica Francisco. Por las tardes iban voluntariamente al colegio para ejercer de guías, y así «a xente que tiña coñecemento sobre o tema tamén o transmitía aos rapaces», añade.
Con el final del curso académico, muchas de las piezas que forman parte de la exposición fueron recogidas, pero otras seguirán perdurando en el tiempo. «Trátase de que os rapaces que empecen sexto o ano que vén, recollan o relevo e tamén fagan de guías», afirma Francisco. Asegura que a exposición «é unha oportunidade para poder recibir peregrinos no centro» e que así «poidan intercambiar coñecemento e experiencias co alumnado».
Unos fantásticos mentores que se toman su merecido descanso de verano para volver con más fuerza el próximo curso.