Bankinter recupera la figura de la consejera coordinadora con el cambio de cúpula
La última junta de accionistas de Bankinter fue histórica, con la salida del que ha sido presi‐ dente las dos últimas décadas, Pedro Guerrero, y el cambio de consejera delegada, con María Dolores Dancausa pasando a presidenta y siendo sustituida por Gloria Ortiz. Sin embargo, hubo un cambio que pasó des‐ apercibido, pequeño pero clave desde el punto de vista de go‐ bernanza: el nombramiento de una consejera coordinadora, una figura que el banco llevaba sin tener años. La elegida fue Cristina García-Peri, socia de Azora con experiencia en ban‐ ca de inversión, que entró en el máximo órgano de gobierno de Bankinter en 2021.
Esta figura no es obligatoria en las sociedades cotizadas, pero sí recomendable en caso de que haya un presidente ejecuti‐ vo y, por tanto, una mayor ne‐ cesidad de contrapesos dentro del consejo. Bankinter no tenía necesidad de adoptar este mo‐ delo, ya que su nueva presi‐ denta es no ejecutiva, como su predecesor. Aun así, ha decidi‐ do hacerlo en un momento en el que el sector se percibían ciertas dudas del Banco Cen‐ tral Europeo (BCE) respecto a la renovación de su cúpula, tal y como publicó este medio. Desde la entidad lo desligan y explican que se debe a un in‐ tento de "alinearnos con el res‐ to de entidades españolas, puesto que éramos los únicos que actualmente no teníamos consejero coordinador". San‐ tander, BBVA, CaixaBank, Sa‐ badell, Unicaja y Kutxabank lo tienen, algunas sin estar tam‐ poco forzadas por su estructu‐ ra de dirección.
Desde el supervisor europeo son partidarios de que haya fi‐ guras como ésta, sobre todo en los bancos cotizados, y siempre se está empujando por un mayor equilibrio posible entre presidente, consejero de‐ legado y resto de consejeros. Algo que ha provocado más de una pelea entre Fráncfort y los bancos españoles en los últi‐ mos meses. Por un lado, el BCE exige que los presidentes no sean ejecutivos, como ocu‐ rre desde hace décadas en Bankinter.
Desde el supervisor europeo son partidarios de que haya fi‐ guras como esta, sobre todo en los bancos cotizados Pero además está tratando de que sean independientes, algo que se ha materializado re‐ cientemente en Unicaja Banco pero no en Bankinter y otras entidades. La tesis para man‐ tenerlo es que un presidente independiente debería tener más capacidad para hacer de contrapeso del CEO que uno que ya previamente estaba en la entidad. Frente a ello, en el quinto grupo español han teni‐ do claro que Dancausa podrá realizar esta labor con la que era una de sus personas de confianza.
Bankinter suma otro factor di‐ ferencial frente a otros compe‐ tidores, la presencia en el con‐ sejo de un vicepresidente eje‐ cutivo, Alfonso Botín, que a su vez es CEO del máximo accio‐ nista del banco, Cartival, con un 33% del capital. Esta socie‐ dad tiene también un domini‐ cal, Marcelino Botín, hermano del vicepresidente.
Nueva estructura
De este modo, el consejo de Bankinter está formado por once consejeros: la presidenta no ejecutiva; dos ejecutivos (Alfonso Botín y Ortiz); dos do‐ minicales (Marcelino Botín y Fernando Masaveu) y seis in‐ dependientes, que serán lidera‐ dos a partir de ahora por Gar‐ cía-Peri.
Por debajo del consejo, Ban‐ kinter ha aprobado cambios en el comité de dirección para amoldarlo a la nueva CEO. La línea general es la de la conti‐ nuidad, con algunas noveda‐ des: Ignacio Lozano es el nue‐ vo director comercial, el direc‐ tor financiero (Jacobo Díaz) asume también banca digital y se crea la dirección de estrate‐ gia, con César Calvo al frente.