El primer coche eléctrico de Xiaomi confirma los peores temores de Elon Musk
El primer coche eléctrico de Xiaomi ha conseguido arran‐ car con un ritmo impresionan‐ te. Se anunció a finales del pa‐ sado año, se enseñó por pri‐ mera vez en el pasado Mobile World Congress de Barcelona y salió a la venta en China ha‐ ce unos pocos días. El SU7, tal y como se ha bautizado la cria‐ tura, consiguió en los primeros 4 minutos a la venta cerrar 10.000 reservas. En poco más de 24 horas la cifra era de 100.000. Es decir, que Xiaomi vendió en un día el mismo nú‐ mero de eléctricos que coches de todo tipo se matricularon en España durante el pasado mes.
Una velocidad de infarto que ha hecho que la compañía ha‐ ya agotado todo el stock pre‐ visto para 2024, un curso en el que pretendía poner en circula‐ ción entre 55.000 y 100.000 vehículos. Es cierto que hay unos días de margen para que los clientes cancelen y recupe‐ ren el depósito, pero tiene pin‐ ta de que el objetivo que se ha‐ bía marcado la multinacional de Shenzhen se va a cumplir de sobra.
Las colas de Tesla son un es‐ pejismo: el problema de las electrolineras es que están va‐ cías
Guillermo Cid La imagen de esta Semana Santa de coches esperando en dos supercarga‐ dores de Tesla de la A3 llevó a que muchos usuarios divisa‐ ran ya el colapso, pero la reali‐ dad es más aburrida Aunque los primeros compra‐ dores ya han recibido su vehí‐ culo, una de las consecuen‐ cias de este estreno triunfal ha sido que ya hay una lista de espera de hasta 7 meses, de‐ pendiendo del modelo y la configuración escogida. Otra es que se han disparado las peticiones para probar el bóli‐ do en los concesionarios. La tercera es que la firma ha teni‐ do que triplicar su velocidad de producción para intentar acortar al máximo estos pla‐ zos. La cuarta consecuencia, y quizá más importante, es que la cotización del fabricante de productos electrónicos se dis‐ paró esta semana un 16%. Todo esto parecen motivos so‐ brados para que Lei Jun no ha‐ ya dejado de darse golpes de pecho. Llevan tres años entre‐ gados a una misión, la de en‐ trar en el mercado de la auto‐ moción, donde han patinado otras tecnológicas de Apple o Dyson.
El malogrado Dyson Car. (M. McLoughlin)
El fundador del gigante de los móviles low cost asegura que sus planes pasan por conver‐ tirse en 15 o 20 años en uno de los cinco mayores fabrican‐ tes de automóviles del mundo. En el camino, por supuesto, pretende llevarlo a otros mer‐ cados, también el europeo, aunque no hay ni tan siquiera una fecha orientativa para que eso ocurra. De momento, pre‐ fieren jugar en casa y se pre‐ senta como un rival muy a te‐
del tamaño
ner en cuenta por sus compa‐ triotas de BYD, que se habían convertido en el mayor vende‐ dor de coches eléctricos del mundo, un puesto que consi‐ guieron arrebatar en el tramo final de 2023 a Tesla. Precisamente, el triunfo de Xiaomi vuelve a suponer la enésima confirmación de los peores temores de Elon Musk. "Creo que si no se establecen barreras comerciales, arrasa‐ rán con la mayoría de las de‐ más empresas del mundo", di‐ jo el magnate de origen sud‐ africano, que ha insistido en varias ocasiones en que las empresas chinas "trabajan más inteligentemente que na‐ die".
Lei Jun, fundador de Xiaomi. (Reuters)
Incluso en enero del pasado año, el millonario se atrevió a aventurar que muy "probable‐ mente" una empresa china se‐ ría la que se "consolidaría co‐ mo segunda opción" del mer‐ cado tras Tesla. Los tiros no iban mal encaminados, lo que no se sabe es si contaba con el sorpasso de BYD.
Pero el pulso de Xiaomi es di‐ ferente al de sus compatrio‐ tas. El SU7 permite competir de tú a tú con los Tesla: en po‐