Adiós al “inventor” de Benalmádena
Muere Enrique Bolín, uno de los alcaldes más polémicos de la Costa del Sol
Benalmádena despedirá hoy a uno de los alcaldes más polémicos de la Costa del Sol y que estuvo más de dos décadas al frente del Ayuntamiento. Enrique Bolín falleció ayer a los 78 años de edad tras sufrir una caída en su domicilio el pasado domingo que agravó su esta- do de salud. Bolín es considerado por muchos como el “inventor” de Benalmádena, ya que fue durante su mandato cuando surgieron algunas de las señas más importantes del municipio, como el Tívoli World, el teleférico, o el puerto deportivo, Puerto Marina, entre otras. Fue nombrado alcalde por primera vez en el año 1966, con tan sólo 26 años de edad.
En 1979, se presentó como candidato en las primeras elecciones municipales democráticas y, aunque su grupo no obtuvo la mayoría absoluta, fue elegido alcalde, cargo que renovaría en las siguientes elecciones, en 1983, esta vez con mayoría absoluta. Sin embargo, esa legislatura apenas duraría un año pues la oposición le presentó una moción de censura.
A partir de aquí comenzaría una de las etapas más polémicas del ex regidor. En agosto de 1989 fue detenido en Gibraltar y condenado a cuatro meses de prisión por posesión de cocaína y de pornografía, lo que motivó su expulsión del Partido Popular. No obstante, y lejos de retirarse de la política, Bolín fundó su propio partido político, el Grupo Independiente de Benalmádena (GIB), a imagen y semejanza del GIL. En 1995 obtiene de nuevo mayoría absoluta y se mantiene de nuevo en el cargo hasta 2007, año en el que el socialista Javier Carnero, actual consejero de Empleo, le arrebató la Alcaldía.