El PP usa el Senado para radicalizar sus ataques a Susana Díaz
Los populares convierten la Cámara en campo de batalla para el 2-D Airean la contratación del marido y otros familiares por empresas que recibieron subvenciones
El PP ha convertido la comisión de investigación del Senado en una plataforma de ataque a Susana Díaz a las puertas de la campaña electoral de los comicios del 2 de diciembre. El senador popular Luis Aznar sometió ayer jueves a la candidata socialista a un duro interrogatorio sobre los trabajos de cuatro de sus familiares (su esposo y tres cuñadas) en empresas subvencionadas por la Junta: una fundación de UGT y una firma subvencionada por la Junta y la Diputación de Sevilla. Ocurrió antes de que la socialista fuese consejera de Presidencia, pero el argumento que ha defendido Luis Aznar con estos ejemplos es el supuesto trato de favor a personas cercanas al PSOE en organizaciones favorecidas por la Administración andaluza.
“Estoy aquí porque hay elecciones en Andalucía el 2 de diciembre; si hubiesen sabido la fecha exacta, me habrían citado en plena campaña”, dijo la presidenta, antes del interrogatorio de Aznar, un senador de León, compañero de Adolfo Suárez en la UCD y el CDS.
Susana Díaz fue citada a esta comisión en la que sólo participa el PP, y que fue creada como respuesta a la constitución en el Congreso de una anterior para analizar la financiación del PP por la Gürtel. La presidenta declaró durante más de cinco horas, entre las 10:30 a las 16:00, en una sala donde llegó acompañada de su secretario general de Presidencia, Máximo Díaz Cano. Los senadores socialistas Francisco Menacho y Juan Cornejo también estaban en el recinto.
La mañana dejó momentos de tensión junto a otros que parecieron de comedia. En un momento de nerviosismo por ambas partes, el parlamentario del PP le recriminó: “Yo no me he tomado cuatro coca colas esta mañana”. “Son cero cero, los vicios que no son malos no hay que esconderlos, señor senador”, le respondió.
Los casos de corrupción abiertos en Andalucía por diversos motivos, tales como el de los ERE o el de los cursos de formación, no están relacionados con la financiación del PSOE, pero el ataque utilizado por Luis Aznar se basa en mostrar que hay personas ligadas al partido que se benefician con empleos en empresa subvencionadas por la Administración. Una de estas empresas es Biodiésel Andalucía 2004, financiada por la Diputación de Sevilla y la Junta, y dedicada al reciclaje de aceites usados. Según un documento que Aznar ha mostrado en la comisión del Senado, hay una lista de 47 personas recomendadas por dirigentes del PSOE sevillano y enviada a la dirección de Biodiésel para ser contratadas. Dos de ellas son Aurora María Moriche, cuñada de Susana Díaz, y Fernando Vargas, “esposo de la delegada de Empleo”, dijo el senador. Se trata de Ester Gil, una militante conocida de Susana Díaz.
La presidenta sostuvo, como defensa, que estos familiares eran “currantes”, que se dedicaban “a ir con un carrito recogiendo aceite usados de las casas”. “No entran en consejos de administración ni le llevan en Jaguar a su casa ni le pagan los cumpleaños”, se defendió.
Biodiésel Andalucía 2004 recibió 900.000 euros de la Junta y 300.000 euros de la Diputación de Sevilla, gobernada por el PSOE. Los listados que posee el PP son de los años 2010 y 2011.