La economía social se cita en Córdoba para diseñar prácticas más sostenibles
Unas 200 personas –llegadas incluso de Europa y Latinoamérica– buscan fórmulas que a medio plazo puedan ser una alternativa “al modelo impuesto por los grandes lobbies”
Córdoba vive desde ayer y hasta hoy el I Encuentro Internacional de Economías Transformadoras, una cita organizada por REAS Andalucía (Red de Redes de Economía Alternativa y Solidaria) y el Área de Cooperación y Solidaridad de la Universidad de Córdoba (UCO) cuyo objetivo es trabajar en red para conseguir “una economía centrada en las personas y no al contrario”, sentenció el presidente de REAS, José Luis Sánchez. Destacó que Córdoba tiene como eje de esa organización “bastantes entidades que están trabajando en los ecomercados o en los procesos de ecología, por lo que nos planteamos el reto de organizar este encuentro este año junto con la UCO”.
En el encuentro se dan cita unas 200 personas procedentes, entre otros lugares, de Madrid, País Vasco, Aragón, Cataluña y de toda Andalucía, además de representantes de países europeos como Bélgica y de estados Latinoamericanos.
La Junta destaca la fortaleza del sector en tiempos de crisis y que genera empleo estable
“El Ayuntamiento de Córdoba es receptivo y sensible a un modelo de economía como éste, que tiene que perseguir dos modelos muy claros, las personas y la sostenibilidad del planeta. Y, en ese sentido, una reflexión en estos momentos en los que los grandes lobbies económicos están imponiendo un sólo modelo de economía, creo que es algo a tener en cuenta”, declaró la alcaldesa de la ciudad, Isabel Ambrosio. “Como bien dice el lema de este encuentro, se trata de enredarse en ese movimiento de ONGs, de administraciones públicas que han hecho una apuesta importante por este modelo, enredarse con ese concepto amplio del bien común, el feminismo, la economía circular, enredarse con otro modelo de empresas que pueden ser susceptibles de incorporarse”.
También habló al respecto la vicerrectora de Políticas Inclusivas y Vida Universitaria de la UCO, Rosario Mérida, quien indicó que “estamos muy empeñados en que la Universidad se encargue de generar espíritu crítico en la ciudadanía, porque pensamos que no hay transformación posible sin que ha- ya un apoyo por parte de la ciudadanía con un cambio de conducta y de valores, y si la ciudadanía no oficia una nueva manera de generar economía que supere el modelo economicista que tenemos depredador que se está cargando toda la energía y sostenibilidad del planeta, con el objetivo de cambiarlo por un modelo centrado en las personas en el que lo fundamental sea esa sostenibilidad, el bienestar y el bien vivir de las personas y el cuidado del medio ambiente para asegurar la pervivencia de las futuras generaciones”.
Sánchez detalló que en el encuentro se abordarían, entre otros asuntos, las realidades sobre el mercado social. “El mercado social es que todas las entidades de economía social y solidaria, los agricultores ecológicos, gente de comercio justo, energías renova- bles... se junten en una red. En este caso queremos conformar el mercado social de Andalucía y se plantea generar espacios de encuentro, de transferencias de compartir economía”, detalló. También se hablará sobre el cooperativismo y la economía solidaria como modelos de cogestión de lo público. “Nosotros pretendemos que la contratación pública sostenible sea un eje de otra forma de coges- tión pública. Las administraciones no se tienen que llenar de funcionarios sino que se tienen que enlazar con la sociedad civil y un elemento muy novedoso para ello en Andalucía son las cooperativas de servicio público”, dijo Sánchez.
Según la Junta, el sector de la economía social representa el 8% del PIB andaluz y está conformado por unas 6.000 empresas, en su gran mayoría cooperativas (3.921) y sociedades laborales (1.987), que suponen un 19,7% del total nacional y generan 79.326 empleos (20,6%). La viceconsejera de Conocimiento, Investigación y Universidad, María Luz Osorio, destacó la fortaleza de la economía social durante los tiempos de crisis y su capacidad para generar empleo estable y de calidad, “manteniendo un reparto de beneficios más justos y promoviendo actitudes más igualitarias”. Osorio dijo que “es necesario facilitar un cambio de rumbo en el sistema socioeconómico, que permita la transición desde la actual situación económica, social y ambiental a otra etapa basada en una sociedad justa, sostenible y solidaria que propicie una economía regenerativa, con una clara mirada de género, en cuyo centro estén los intereses de las personas”.