Unas cien personas tratan de rescatar a un niño de 2 años en un pozo de Málaga
● Las inmersiones con una cámara robotizada han sido infructuosas ● Los padres aseguran que el menor cayó por el orificio
Un orificio de apenas 25 centímetros de diámetro y 110 metros de profundidad. Por ese agujero, excavado en una captación de agua, se presume que cayó poco antes de las 14:00 de ayer un menor de 2 años. Al ciere de esta edición, un dispositivo integrado por un centenar de personas trataba de localizar al pequeño.
Ésa es la hipótesis manejada desde el primer momento por los efectivos de la Guardia Civil y del Consorcio Provincial de Bomberos que acudieron el lugar, localizado en el Dolmen del Cerro de la Corona, en Totalán, en la provincia de Málaga,tras recibir el aviso del pa- dre de menor y del ser vicio de emergencias 112.
La versión del progenitor sirvió de guía a la intervención de los efectivos. Y en ella se mantenía hasta última hora de la noche de ayer la Benemérita, que asumió el control de la investigación. “Se trabaja en el rescate y la localización; las averiguaciones y toda la investigación se tendrá que hacer posteriormente”, explicó un portavoz de la Guardia Civil a los medios de comunicación.
De acuerdo con la versión oficial, la única hipótesis con la que se trabaja es que el pequeño efectivamente cayese al pozo. “La familia nos comenta que se ha caído y se trabaja sobre esa hipótesis”, añadió, al tiempo que, en otro momento de su corta declaración, añadió: “los padres es lo que nos dicen”. La familia es de la barriada de El Palo, en Málaga capital, y al parecer la finca en la que tuvieron lugar los hechos pertenece a unos familiares de los padres.
Sin embargo, las tareas realizadas durante toda la tarde no permitieron localizar rastro alguno del niño. “Nos queda una larga noche”, se atrevía a predecir el portavoz.
En las labores se cuenta con colaboración de varias empresas privadas, entre ellas la que realizó el pozo de captación de agua. Se empleó una cámara robotizada para tratar de visualizar el interior del orificio y determinar la altura a la que se encontraba. Los dos intentos realizados resultaron infructuosos, según fuentes próximas al suceso. La primera de las intentonas permitió bajar el dispositivo hasta unos 78 metros de profundidad. En ese momento, según fuentes consultadas, la cámara tocó tierra húmeda. La duda es si en su caída el pequeño provocó un desprendimiento y quedó bajo ese nivel de tierra.
Esta circunstancia incrementó la dificultad en las alternativas de rescate analizadas. Una de ellas pasa por la realización de un sondeo paralelo al pozo original, a través del cual acometer el rescate. “Pero no es lo mismo que esté a 78 metros que a 107”, expusieron las fuentes. Posteriormente, se hizo una segunda prospección, que tampoco parece haber sido satisfactoria.
El dispositivo desplegado en el Dolmen del Cerro de la Corona está integrado por cerca de un centenar de efectivos. Integrantes de la Guardia Civil, del Equipo de Rescate Intervención en Montaña (EREIM), del Grupo de Especialidades Subacuáticas (GEAS), del Cuerpo Nacional de Policía y la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES), así como del Consorcio Provincial de Bomberos. Además, según precisaron desde el 112, se solicitó la asistencia del Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Desastres (GIPED) del Colegio de Psicólogos de Andalucía.