Córdoba se incluirá este año en la lista de zonas de la UE libres de brucelosis ovina y caprina
En el ejercicio 2018 se cerró la comprobación de que la provincia cumple los requisitos marcados desde Bruselas
La Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural ha informado de que el ejercicio 2018 se ha cerrado con la comprobación de que las provincias de Córdoba, Huelva y Sevilla y Córdoba cumplen los requisitos para la calificación por la Unión Europea (UE) como provincias oficialmente libres de brucelosis ovina y caprina. Las fuentes de la Administración autonómica han añadido que el expediente se enviará al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para su traslado a la Comisión Europea (CE). Se espera, en consecuencia, que estas provincias puedan sumarse a la lista de territorios libres de brucelosis en 2019”, han apuntado las fuentes.
Este anuncio llega al mismo tiempo que el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) ha publicado la inclusión de Granada, Almería, Jaén y Cádiz en la lista de territorios oficialmente indemnes de brucelosis, en el caso de las tres primeras provincias, bovina; y en el de la cuarta, ovina y caprina. La decisión se produce después de que el Comité Permanente de Vegetales, Animales, Alimentos y Piensos (PAFF) ratificara la declaración por unanimidad de todos los Estados Miembros. La publicación en el DOUE viene a hacer efectiva unas declaraciones que suponen un reconocimiento del esfuerzo del sector, con el apoyo de las Agrupaciones de Defensa Sanitaria Ganadera (ADSG) y la Junta de Andalucía para avanzar de forma continua en la erradicación de estas enfermedades. “La lucha contra la brucelosis, en concreto, cuenta con un aspecto de relevancia para la salud pública y su eliminación conlleva un relevante beneficio para la sociedad”, según han insistido las fuentes de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural.
La declaración de zona oficialmente indemne es, además, un incentivo para los sectores productivos, ya que implica la f lexibilización de algunas medidas de control impuestas hasta ahora de acuerdo con la normativa comunitaria. De igual modo, contribuye a la mejora del estatus sanitario de Andalucía, con lo que facilita, en paralelo, el mantenimiento y la apertura de nuevas posibilidades comerciales para la ganadería de la región.
El trabajo realizado a la largo de los últimos años por la Junta de Andalucía junto a los ganaderos y las ADSG para aplicar los programas de erradicación de las enfermedades ha demostrado ser una gran herramienta para la lucha contra las afecciones del ganado. Esta labor de cooperación ha permitido dar pasos definitivos hasta el punto de acabar con enfermedades que hace una década parecían realmente difíciles de eliminar.
La brucelosis es el nombre general de las infecciones causadas por especies del género Brucella en los animales o en el hombre. El ganado bovino en España se ve afectado principalmente por Brucella abortus y raramente por Brucella mellitensis, mientras que el ganado ovino y caprino es afectado por Brucella mellitensis.
Clínicamente la enfermedad se caracteriza por la presencia de abortos, retención de placenta, orquitis, epididimitis y raramente artritis, con excreción de los microorganismos en las descargas uterinas y en la leche. Esta infección causa pérdidas económicas significativas debido a la disminución de la productividad, además de pérdidas comerciales.
La Brucella mellitensis se suele introducir en un rebaño a través de un animal infectado. El semen también puede ser una fuente de infección. Se puede erradicar este organismo de un rebaño por medio de prueba y eliminación, o despoblación. En áreas donde la Brucella mellitensis es endémica se suele colocar a los rebaños infectados en cuarentena y se sacrifica a los animales. Debido a que los perros pastores también pueden resultar infectados, algunos países requieren que se les sacrifique, o que se los trate con antibióticos y se los castre. Se deben limpiar y desinfectar a fondo todas las áreas expuestas a los ani- males infectados y sus secreciones. Generalmente, se evita la infección en otras especies si se controla la Brucella mellitensis en las ovejas y cabras. Gracias al programa de erradicación puesto en marcha en Andalucía se consiguió año a año reducir de forma considerable los valores de prevalencia e incidencia en gran parte del territorio y se lograron avances muy significativos hacia la erradicación de la enfermedad, consiguiéndose alcanzar valores de prevalencia igual a cero en un gran número de provincias y de comarcas.