Triunfos vitales del Córdoba B y el Ciudad de Lucena en casa
El Córdoba B vence al Sevilla C y cierra una serie de seis jornadas sin ganar Chuma abrió el marcador y Carracedo certificó el triunfo en el descuento
El Córdoba B regresó a la senda del triunfo ante el Sevilla C. Mucho trabajo le costó a los blanquiverdes superar a un equipo que también buscó desde el pitido inicial la victoria y que saboreaba el empate cuando, ya con el tiempo cumplido, Carracedo marcó un excelente gol para dejar los tres puntos en casa. Con esta victoria, el filial rompe una racha de seis jornadas consecutivas sin sumar de tres, serie en la que sólo había logrado tres empates.
El técnico blanquiverde, Juan Marrero, de nuevo tuvo que recomponer el once inicial ante las ausencias, sobre todo la de Miguel Ángel, sancionado con cuatro partidos. El preparador del fi- lial movió líneas, dando salida a Kevin en la medular y a Moyano en la media punta, devolviendo a Carracedo a la banda derecha.
Acertó Marrero y de inicio el B salió muy metido en el partido y tratando de poner cerco al portal defendido por un Jona que resultó providencial en los primeros minutos. Primero fue Carracedo el que probó al meta hispalense con un duro disparo desde la frontal del área. Después, también lo intentaron Kevin y Sar- miento. Pero el Sevilla C superó el fuerte arranque blanquiverde y comenzó a acercarse también con cierto peligro a las inmediaciones de Alberto, buscando en la velocidad y las transiciones rápidas sus mejores argumentos ofensivos. El duelo se equilibró y las defensas comenzaron a imponerse a los hombres que tanto por uno como otro lado trataban de crear peligro.
Tras la reanudación, el Córdoba B salió de nuevo volcado y con sólo dos minutos de juego se produjo una internada por la banda derecha de Carracedo, que llegó hasta línea de fondo y su pase atrás lo mandó Chuma al fondo de la red, abriendo el marcador.
Pero aún no habían digerido los blanquiverdes el tanto cuando el filial sevillista igualó de nuevo la contienda. En una jugada similar a la que sirvió al conjunto local para abrir el marcador, Simo se coló por la izquierda y su servicio atrás lo aprovechó Pliego para empatar el duelo.
Los dos equipos querían el triunfo y, aunque sin arriesgar excesivamente, convirtieron el partido en un ida y vuelta que continuamente moría en la frontal del equipo que defendía, sin que apenas tuvieran que intervenir los porteros. La salida de Cano dio aún mayor carácter ofensivo al cuadro de Juan Marrero. El recién ingresado obligó a Jona a despejar a saque de esquina con apuros. Pero el segundo filial sevillista no se amilanó. Al contragolpe también buscó el tanto que le pusiera por delante en el marcador. Alberto, atento, detuvo el intento de Simo.
El Córdoba B expuso más en los compases finales y, prácticamente en el descuento, encontró el premio. Chuma asistió a Carracedo para que el extremo, de vaselina, batiera a Jona y diera el triunfo al filial blanquiverde.
Carracedo, que dio la asistencia del primer tanto blanquiverde, marcó el de la victoria