El Dia de Cordoba

El aciago adiós de Carreño

El asturiano, que ganó los dos primeros sets y mandaba por 8-5 en el ‘tie-break’ del quinto, perdió la concentrac­ión tras una polémica acción

- Javier Cortés (Efe) MELBOURNE

Cuando mejor lo tenía, cuando acariciaba los cuartos de final de un Grand Slam por primera vez en su carrera, a Pablo Carreño se le escapó entre las manos el triunfo ante Kei Nishikori en el Abierto de Australia, en un dramático duelo que se llevó el japonés por 6-7 (8), 4-6, 7-6 (4), 6-4 y 7-6 (8) tras más de cinco horas de partido. En esta misma jornada en Melbourne Novak Djokovic consiguió una trabajada victoria ante el ruso Daniil Medvedev, que acabó desfondado, por 6-4, 6-7 (5), 6-2 y 6-3, mientras que el alemán Alexander Zverev, cuarto cabeza de serie, cayó ante el canadiense Milos Raonic también en cuatro sets.

El español, que se había llevado las dos primeras mangas, mandaba en el super tie-break del quinto set (a 10 puntos o diferencia de dos puntos) dominando por 5-8. Fue el momento clave. La polémi- ca estuvo servida cuando el juez árbitro concedió un punto al nipón en una controvert­ida acción. El golpeo del asturiano tocó en la red, botó junto a ella y el juez de línea la cantó fuera. Nishikori, con ventaja, continuó la acción justo cuando el juez decía “out”, pero Carreño pidió el ojo de halcón. La repetición mostró que la pelota había botado sobre la línea y no fuera como había cantado el juez de línea. Pero el juez de silla no concedió la repetición del punto, porque observó que Nishikori había rematado luego la jugada con un golpe ganador y considera que lo hizo antes de que el línea la cantara fuera.

Carreño se descentró con las protestas y la desesperac­ión y el japonés logró los siguientes cuatro puntos para llevarse el choque. El enfado del gijonés fue a más y tras felicitar a su rival, evitó el saludo al juez, al que dirigió varios insultos, y estampó el raquetero contra el suelo antes de retirarse al vestuario, por lo que podría ser duramente sancionado.

“Estoy triste. La manera de irme no ha sido la adecuada. He perdido la cabeza; ése no era yo. Quiero pedir disculpas, pero es muy triste acabar así después de hacer uno de los mejores partidos de mi vida”, apuntó antes de referirse a la polémica jugada: “La cantan fuera erróneamen­te antes de que golpee la pelota Nishikori. Y el juez, no sé por qué, decide darle el punto a él. ¿Para qué me deja entonces pedir el ojo de halcón si tenía tan claro que no se repetiría? No tiene sentido”, afirmó.

Nishikori se enfrentará ahora a Djokovic, que superó por tercera vez en su carrera a Medvedev.

Por su parte, Zverev, vigente campeón de las ATP Finals y que quería acabar en Melbourne con su mala racha en los Grand Slams, se desquició ante la solidez de Raonic, que venció por 6-1, 6-1 y 7-6 (5). El canadiense tiene ahora la posibilida­d de igualar su mejor actuación en un Grand Slam frente al francés Lucas Pouille, verdugo del joven croata Borna Coric. El galo reaccionó a tiempo para sacar su mejor tenis después de mostrar algunas dudas en su juego durante sus anteriores rondas y venció en un exigente partido por 6-7 (4), 6-4, 7-5 y 7-6 (2) para conseguir el billete para los cuartos de final.

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RITCHIE TONGO / EFE Carreño, con gesto contrariad­o.

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