Erdogan impugnará la votación en Estambul tras su derrota
La pérdida de importantes alcaldías, como Ankara, Adana y Antalya, y la posible derrota también en Estambul, supone un duro golpe para el partido islamista AKP y su líder y presidente de Turquía, Recep Tayip Erdogan, que había planteado las elecciones locales del domingo como un plebiscito sobre su gestión.
Si se confirma el resultado en Estambul, donde el AKP ha impugnado el recuento, la metrópolis tendría por primera vez un alcalde socialdemócrata desde 1994, cuando Erdogan ganó las municipales con una formación islamista precursora del AKP.
El socialdemócrata Partido Republicano del Pueblo (CHP) logró también en Ankara, Antalya, Adana y Mersin, estas dos últimas hasta ahora en manos del derechista MHP, aliado del AKP.
Pero este retroceso en el mapa electoral no se debe a un descalabro en los votos del AKP, que sólo ha perdido un 1% del voto en comparación con los comicios de 2014, e incluso sube un 2% en toda Turquía respecto a las nacionales de junio.
Entre los factores que pueden explicar el giro político, destacan los problemas económicos. El descontento entre los turcos por la mala marcha de la economía, la crisis de la lira en agosto pasado, la alta inflación –un 25% en los últimos meses, el doble de lo habitual durante la década– y un cierto cansancio del discurso vehemente de Erdogan pueden haber hecho mella en el electorado.