A salir del atolladero
El Lugo llega con bajas importantes, sobre todo en el centro del campo, a un partido clave ante un rival directo
En su séptima campaña consecutiva en Segunda, el Lugo partía de nuevo con el objetivo de la permanencia. Pero las cosas se le complicaron desde el inicio y ahora marca la barrera de la salvación con una renta de solo un punto sobre el Extremadura, pero amenazado también por el Nàstic y el Córdoba, equipo al que visita mañana.
A este trascendental partido, el Lugo llega tras mostrar su mejor cara ante el líder, Osasuna. Y aunque en el tramo final los navarros nivelaron dos goles –2-2 fue el resultado–, el cuadro gallego enseñó el camino con el que quiere certificar la salvación: orgullo, corazón, ganas y argumentos con balón, con transiciones rápidas y envíos a la espalda de la defensa rival buscando a los dos puntas que puso en liza Alberto Monteagudo, técnico que relevó en la jornada 12 a Javi López. A su llegada, el manchego propuso un 4-2-3-1, que en algunos duelos ha transformado en ese 4-4-2. Exige presión agobiante en la salida del rival, defendiendo en campo contrario, líneas juntas, intensidad y verticalidad.
SIN BALÓN
Con Juan Carlos en la portería, coloca una línea de cuatro por delante en la que confía en Campabadal
por la derecha, con Gerard Valentín como alternativa; y Luis Ruiz por la izquierda, con la opción de José Carlos. Los laterales se proyectan continuamente en ataque, aunque esas salidas le hacen sufrir en defensa. Como pareja de centrales, Vieira y José Carlos, con la opción de Josete, a los que incluso el técnico ha utilizado en la medular. Son intensos en la marca, contundentes y con buen juego aéreo, aunque adolecen de rapidez.
CON BALÓN
En el centro del campo, las bajas de Gil, Seoane y Pita, dejan para ese puesto específico solo a Aburjania, jugador con sacrificio defensivo, aunque también con calidad para avanzar metros y jugar más cerca de la portería rival. Junto al georgiano podrían estar Josete o José Carlos, que ya han jugado ahí, o Juan Muñiz. Los dos primeros darían mayor empaque y equilibrio a la medular, mientras que Muñiz aportaría mayor calidad.
En los costados, Monteagudo apuesta por dos jugadores con calidad, desborde y velocidad como Tete Morente y Lazo, con las alternativas de Iriome o Toni Martínez. Y arriba, como referencia, podrían repetir Herrera y Escriche, que se entienden a la perfección y tienen capacidad para trabajar en la presión tras pérdida de forma coordinada. Como alternativa, Barreiro, un auténtico hombre de área.
LO MEJOR
Bandas con desborde y rapidez.
LO PEOR
Presión por la cercanía del peligro.