Sanitarios e ingenieros de Málaga fabrican ya ventiladores
Un equipo multidisciplinar de profesionales de la Universidad de Málaga han unido sus fuerzas para diseñar el prototipo de un nuevo respirador que busca paliar las carencias provocadas por la propagación del coronavirus en la asistencia médica. El dispositivo, cuyos primeros resultados son satisfactorios, está basado en piezas industriales comunes, de fontanería y aire acondicionado, y podría ser fabricado en, aproximadamente, unas dos horas. El grupo está formado por profesionales sanitarios de los hospitales Regional de Málaga y Virgen de la Victoria, científicos del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga y profesores de ingeniería de la UMA. Según el vicerrector de
Investigación de la UMA, Teodomiro López Navarrete, el objetivo que se fijó entonces fue crear un respiradores fácil de hacer, barato y, sobre todo, que satisfaga la necesidad de las unidades de cuidados intensivos de los hospitales para atender pacientes con patologías respiratorias causadas por la pandemia. El precio –en materiales– es de 600 euros y su tiempo de fabricación, de unas dos horas contando con el trabajo manual de dos personas, por lo que todo apunta a que se reducirá tras la fase de industrialización. Según reveló Elías Bendodo, este equipo tiene permiso del Ministerio de Sanidad para fabricarlos y se pondrán a disposición del sistema sanitario.