El periodo de alergia podría reducirse con las altas temperaturas y la falta de lluvia
Esta semana ha comenzado la primavera, estación del año en la que florecen la mayoría de las especies de clima templado y, por tanto, la estación en la que se liberan una mayor cantidad de granos de polen a la atmósfera. La Red Española de Aerobiología (REA), como red técnica de la Asociación Española de Aerobiología (AEA), presenta previsiones semanales en su web sobre el contenido de polen en el aire. La Universidad de Córdoba (UCO) ha detallado en un estudio que estas se dan a conocer “como medida preventiva para planificar actividades por parte de un importante porcentaje de la población que sufre algún tipo de alergia al polen”.
Tras un invierno “en el que nos hemos visto expuestos a elevadas concentraciones de polen del ciprés, en este momento son otras las especies arbóreas que se encuentran en floración, como es el caso del abedul, el aliso, la morera y el plátano de sombra”. Por ello, en el estudio se ha destacado que “el polen del plátano de sombra es una de las principales causas de alergia durante la primavera temprana, un árbol que se caracteriza por la liberación de sus granos de polen de forma explosiva y durante un periodo corto de tiempo”.
Las concentraciones de polen de plátano en el aire “dependen, en gran medida, de su profusión como especie ornamental” y por las labores de poda.
Durante este periodo, algunas especies herbáceas se encuentran en f lor, “entre las que destacan las urticáceas, donde parietaria produce polen alergénico”.
Las extremas condiciones del tiempo podrían no facilitar que la f loración sea tan elevada como en otros años. Como siempre, la exposición al polen durante la primavera dependerá de las lluvias que se presenten.