Restricciones
Las restricciones impuestas por Sanidad y publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE) suponen en la práctica el cierre perimetral de la capital del país y de una serie de grandes municipios muy próximos a ella. Ahora bien, pese a que han tenido que ser adoptadas con el único objetivo de contener el impresionante incremento de la segunda ola de la actual pandemia, no han sentado bien en una gran parte de la ciudadanía. En efecto, la presidenta madrileña y su consejero de Sanidad, se han visto obligados a aceptar las nuevas medidas adoptadas, eso sí, con reticencias, pero permitiéndose manifestar bien a las claras no haberse respetado las competencias autonómicas, además de tildar de desleal la actuación del Gobierno al no haberse aplicado dichas restricciones en base a cuestiones técnicas.
Lo que resulta curioso es que, por no cumplirse el aforo ni el horario de fiestas, el ultimo sábado se desalojaron diversas fiestas multitudinarias en viviendas madrileñas con unas 200 personas sin mascarilla y no guardando para nada la distancia de seguridad establecida, llegándose a identificar en una de ellas a un famoso jugador baloncestista español de la NBA, que –nunca sea mejor dicho– se pasó las restricciones habidas y por haber, sino por el forro, por lo alto.
Carmen Trasobares (correo electrónico)
En la órbita de Putin
Tras la reunión celebrada el mes pasado, Putin ha entregado a Lukashenko 1.500 millones de dólares, la primera desde las elecciones bajo sospecha del pasado 9 de agosto. El presidente ruso ha escenificado ante el mundo, pero especialmente ante la Unión Europea, que él no solo apoya al actual Gobierno de Bielorrusia, sino que Rusia no abandona a sus amigos. Una buena muestra de esto no solo es la concesión del multimillonario crédito, sino la disposición rusa a respaldar una reforma constitucional que no permite presagiar nada bueno.
Las marchas pacíficas y masivas que se suceden en Minsk y en todo el país para seguir reclamando unas elecciones limpias son una amenaza real para Lukashenko, pese a que los líderes de la oposición estén fuera del país o en la cárcel. Precisamente por eso es más temible la reacción de un Gobierno que ha detenido y torturado sin piedad, pero que ha tenido que buscar en Rusia protección y respaldo.
Juan García (correo electrónico)