La UE destaca falta de compromiso con el tren Algeciras-Bobadilla
La línea férrea no tiene garantizado el fluido eléctrico, advierte la coordinadora europea del Corredor Mediterráneo
Alberto Rodríguez
La electrificación del tendido ferroviario entre Algeciras y Bobadilla se mantiene como una de las cuestiones más en el aire a la hora de abordarse el mandato europeo de la modernización del Corredor Mediterráneo dentro del horizonte del año 2030.
Así los recoge nuevamente el Cuarto Plan de trabajo del Corredor Mediterráneo Europeo publicado el pasado jueves 8 de octubre por la Comisión Europea. El estudio, firmado por la coordinadora del corredor, Iveta Radicova, hace un repaso del actual estado de los trabajos y de las previsiones para interconectar los países ribereños del Mediterráneo con el resto de Europa. El trazado de este corredor discurre por España, Francia, Italia, Eslovenia, Croacia y Hungría.
En el citado informe de la Comisión Europea vuelve a ponerse en evidencia la falta de compromisos firmes para la electrificación del tendido cabecera Sur del Corredor Mediterráneo y que, a su vez, goza de doble prioridad por tratarse de un tramo compartido con el Corredor Atlántico.
“La electrificación está asegurada en el 90% de las líneas ferroviarias del corredor. Solamente falta en algunos tramos en España, como la línea Bobadilla-Algeciras. En el resto del corredor se emplean tres voltajes diferentes, lo que plantea el problema de la interoperabilidad”, subraya la coordinadora. A Radicova únicamente le consta que “en marzo de 2019 se iniciaron los trabajos preparatorios con la redacción del proyecto de ingeniería para la construcción de dos subestaciones de suministro eléctrico”.
A su vez, en los diagramas sobre el estado de cumplimiento, la Algeciras-Bobadilla aparece con un posible grado de incumplimiento en el año 2030 sobre la electrificación.
El pasado mes de junio, la presidenta del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Isabel Pardo de Vera, se comprometió en una reunión con los agentes sociales y con los agentes económicos de la Comarca de Gibraltar a acelerar el proceso todo lo posible después de que en abril se conociera que la electrificación del tramo Ronda-Bobadilla tiene que someterse a una evaluación de impacto ambiental ordinaria, en l ugar de una tramitación simplificada.
Este proceso, del que depende seguir adelante con la actuación, supone retrasar durante meses los planes de Adif. La entidad pública afirmó entonces que ha dado prioridad a todas las licitaciones y redacciones de proyectos que no estén afectados por ese obstáculo.
El desarrollo de las obras de modernización en cuanto a la adaptación al ancho internacional UIC es igualmente analizado en el estudio de la Comisión Europea. Sobre este aspecto, la coordinadora apunta que “las obras están en curso”. Los trabajos se centran en la creación del llamado tercer hilo para renovar las vías a través del mismo trazado con un tercer raíl que permita circular a los trenes de ancho ibérico y ancho estándar. Adif mantiene el año 2022 como horizonte para tener terminadas las obras.