Hallan una terapia que mejoraría el pronóstico en tumores cerebrales
● Investigadores del CNIO descubren que la combinación de dos fármacos ayuda a reducir la resistencia al tratamiento ● La tasa de supervivencia a esta enfermedad apenas mejoró en 50 años
Un equipo de investigadores ha descubierto que una terapia combinada de dos medicamentos podría mejorar el tratamiento de los pacientes con los tumores cerebrales más frecuentes y agresivos, cuya tasa de supervivencia apenas ha mejorado en los últimos 50 años.
El trabajo se ha llevado a cabo en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), donde los científicos han estudiado en profundidad la resistencia a un medicamento –la temozolomida– que se utiliza como tratamiento principal contra el tumor cerebral más agresivo –el glioblastoma–, al que muchos de los pacientes dejan de responder con el paso del tiempo.
Los investigadores han comprobado que la combinación de ese medicamento con otro –el dianhidrogalactitol– ayuda a eludir esas resistencias y aumenta la supervivencia, algo que ya han demostrado en ratones con tumores cerebrales, informó ayer el CNIO tras la publicación de los resultados de esta investigación en la revista Molecular Cancer Therapeutics, de la Asociación Americana para la Investigación del Cáncer.
Los glioblastomas son los tumores cerebrales más frecuentes y agresivos, con una tasa de supervivencia que apenas mejoró en los últimos 50 años, lo que pone de manifiesto, subrayó el CNIO, la necesidad urgente de desarrollar nuevas estrategias terapéuticas.
El equipo liderado por el investigador Massimo Squatrito, jefe del Grupo de Tumores Cerebrales de la Fundación Seve-Ballesteros del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), propone tras su trabajo una novedosa estrategia terapéutica basada en la combinación de esos fármacos.
Squatrito explicó a Efe que se trata de un trabajo preclínico “muy alentador”, pero incidió en que hasta que no se validen los resultados en un entorno clínico será difícil predecir cuándo se traducirá el hallazgo en un tratamiento beneficioso para los pacientes con este tipo de tumor.
“Antes de que nuestros resultados puedan tener un impacto real en los pacientes, esta combinación tiene que ser probada en ensayos clínicos para comprobar su seguridad y que no implicará ninguna toxicidad asociada para ellos”, manifestó Squatrito.
El científico explicó que la “temozolomida” está ya aprobada para el tratamiento del glioblastoma y que el uso del “dianhidrogalactitol” todavía se investiga en ensayos clínicos y hasta ahora sólo se ha aprobado para el tratamiento de un tipo de leucemia y el cáncer de pulmón en China.
El CNIO recordó que, en la actualidad, el principal y casi único tratamiento contra ese tipo de tumores es la combinación de la radioterapia con la quimioterapia con “temozolomida”, tras la extirpación quirúrgica.
Como la mayoría de las quimioterapias, ese fármaco produce daños en el material genético de las células tumorales, induciéndolas al colapso y muerte celular, y en casi la mitad de los pacientes los tumores se vuelven resistentes a este fármaco y continúan creciendo incluso durante el tratamiento.