El centroderecha exprime el discurso de la “libertad”
● Ayuso acusa al Gobierno de “enfrentar” a la ciudadanía ● Gabilondo se sacude la sombra alargada de Sánchez
Vox ataca al Ejecutivo por “no estar en los problemas reales y sí en el guerracivilismo”
Isabel Díaz Ayuso viene exprimiendo, exprime y exprimirá hasta el 4 de mayo la bandera de la “libertad” y de “vivir en paz”. La neopolítica recurre más aún que antaño a los términos emocionales, aunque quizás no recordemos bien los mítines cañeros de Manuel Fraga o Alfonso Guerra de los ochenta.
Miguel Ángel Rodríguez, gurú comunicacional con José María Aznar y asesor áulico de la presidenta de Madrid, va a ondear hasta el final la bandera de la libertad ante los oponentes del PP en las próximas elecciones a la comunidad. La candidata a la reelección pidió ayer en Fuenlabrada para un proyecto que “trasciende las siglas del PP” basado en que cada uno viva “en paz” y “en libertad”. “Éste es el proyecto de todos los ciudadanos que quieren sentir que merece la pena madrugar cada día, de unos buenos servicios públicos, de una buena educación y de una gran integración”, remarcó.
Defendió que ha trabajado “con cabeza y corazón” dejándose la piel “cada día desde hace dos años” y lo seguirá haciendo porque merece la pena por los “desvelos”, “preocupaciones” y por la situación de cada una de las familias. “No os vamos a fallar”, clamó en un multitudinario mitin en Fuenlabrada, uno de los feudos de los socialistas en la Comunidad de Madrid.
Ayuso acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de “enfrentar” a “hombres y mujeres y ciudadanos de todas clases sociales”, y “controlar nuestras vidas” mientras las personas quieren que “les dejen vivir en paz y en libertad”.
El candidato socialista, Ángel Gabilondo, se sacudió ayer la sombra alargada de Sánchez en la campaña electoral. Insistió en que el presidente del Gobierno no los eclipsa al apoyarlo en la campaña, sino al contrario, y advirtió de que sería propio de un “ego adolescente” rechazar su respaldo al pensar que le quita “espacio”. “Ahora sólo falta que por un prurito de ego adolescente uno empiece a pesar que le parece mal que le apoyen o que le quiten aire o espacio”, aseguró.
Así replicó al ser preguntado sobre si le molesta que Ayuso le diga que parece que el aspirante socialista en las elecciones madrileñas es Sánchez y no él. “No creo que lo diga por molestar, pero si lo dice para molestar, no tiene mucho sentido. Yo me molesto muchas veces, pero no suele ser por estas cosas. Yo soy nada
más y nada menos que Ángel Gabilondo, y Pedro Sánchez es Pedro Sánchez, presidente del Gobierno y secretario general del PSOE”, reivindicó.
Coincidió Ayuso en Fuenlabrada con un acto de Vox. Rocío Monasterio subrayó que la izquierda “ha abandonado a los trabajadores” y que “no conoce” la realidad de “la España que madruga” y que crea riqueza, a los que consideró que “ha engañado vilmente”. Junto al presidente de su formación, Santiago Abascal, y ante alrededor de un millar de personas, Monasterio criticó que a los partidos de izquierda les gusta lo público para su “niñera oficial”. “Les gusta lo público y dicen que es para una sanidad excelente y a la primera de cambio están en la privada, engañado a los suyos”, clamó Monasterio. También cargó contra su “defensa de la libertad” cuando luego atacan a otros candidatos como en Vallecas. “Tienen miedo a que os hablemos, que os contemos la verdad, que os digamos qué vamos a hacer con lo que tanto os cuesta conseguir”. “¿El escudo social dónde esta?”, se cuestionó antes de la intervención de Abascal, quien resaltó la importancia de impedir “el asalto comunista” a las instituciones madrileñas frente a un Gobierno que “está batasunizando la política española”, que “no piensa en los problemas reales y está en el guerracivilismo”.
Por otro lado, Podemos propone crear en Madrid una ley que ayude a las pequeñas y medianas empresas a competir en la contratación pública e impulsar una banca pública y una empresa de “participantes industriales” que impulse sectores diferentes a la construcción y a la hostelería, porque “Madrid no puede vivir exclusivamente de las cañas”, según dijo su líder, Pablo Iglesias, tras visitar las instalaciones de la empresa metalúrgica Fabrez Group, en Daganzo.