Salud Pública estudia el retraso de la administración de la segunda dosis
● El objetivo es acelerar la protección del mayor número de ciudadanos con el primer pinchazo
La recuperación de una vida semejante a la aparición de la pandemia requiere, como es sabido, la inmunización colectiva o de rebaño. Y, a falta de las dosis suficientes de vacunas para la pronta adquisición de ese nivel de protección que permita la libertad de movimiento y la reactivación económica, los técnicos sanitarios y los dirigentes políticos están valorando nuevas estrategias de vacunación. Uno de los cambios propuestos consiste en aplazar la segunda dosis con el objetivo de tener a una mayor proporción de gente con una sola dosis puesta.
Se trata de una cuestión científica que es motivo de debate desde hace meses. En España, el Gobierno y las comunidades autónomas están debatiendo si, en efecto, espaciar la inyección de la segunda dosis en la población con menos de 79 años. El fin, la lógica, es disponer de mayor número posible de personas menos vulnerables a la enfermedad, que es una estrategia seguida en países como el Reino Unido.
Esta propuesta figura en el orden del día de la Comisión de Salud Pública después de haber sido formuladas por comunidades autónomas como Cataluña y Andalucía. La nueva estrategia consistiría en aplicar la segunda dosis a las seis u ocho semanas del primer pinchazo en lugar de los periodos indicados en los prospectos de Pfizer (21 días) y Moderna (28 días).
La controversia científica continúa. Aún no hay datos publicados sobre el espaciado entre vacunas superior al de los ensayos clínicos, explica la inmunóloga del CSIC Matilde Cañelles, quien sí ha examinado “la dinámica de la respuesta inmune entre dosis en mayores y menores de 80 años. “Mientras las personas con menos de 80 años ya desarrollaban una respuesta bastante robusta tras la primera dosis, en los mayores de 80 esta respuesta era subóptima y sólo con la segunda dosis alcanzaban una buena protección”, afirma la científica, quien cree, por eso, que puede considerarse “espaciar más las dosis en menores de 80 años”.
Aunque ésta y otras cuestiones técnicas se debaten hoy en Salud Pública, la decisión sobre una nueva indicación de las dos vacunas de ARNm no será automática. Además de precisar el visto bueno del Consejo Interterritorial, que se reúne mañana, el director del Ccaes, Fernando Simón, avisó ayer de que las discusiones sobre la nueva estrategia está aún en una fase embrionaria.