Piedra de toque
● Italia busca un pleno de triunfos para cerrar su gran primera fase ● Gareth Bale la gran amenaza de Gales
Andrea Montolivo (Efe) Completar el trabajo empezado con las dos goleadas por 3-0 a Turquía y Gales, acabar como primero de grupo y poner a prueba a algunos suplentes ilustres como Federico Chiesa o Andrea Belotti son los objetivos con los que Italia recibe a Gales en la tercera y última jornada del grupo A.
En un ambiente de entusiasmo por las diez victorias consecutivas, todas sin recibir goles, y por un juego brillante y atractivo, el seleccionado de Roberto Mancini se jugará la primera plaza contra el Gales de Gareth Bale, que llega a la cita como segundo clasificado, con cuatro puntos, a dos de Italia.
A la selección azzurra le vale un empate para avanzar a octavos como primera clasificada, pero eso le podría abocar a afrontar un camino a priori más complicado. Ucrania o Austria, probablemente, sería su rival en octavos y tendría a Bélgica –cuartos– y Francia –semifinales– en el horizonte. Si acabara segunda, le tocaría Finlandia o Rusia en octavos y la más accesible Holanda en un posible duelo de cuartos.
Se trata, sin embargo, de especulaciones del entorno italiano que no deben afectar a una Italia que saldrá a ganar fiel a su estilo, con la posibilidad de igualar su récord de treinta partidos sin derrotas, que se remonta a los años 30 del pasado siglo.
Tras aportar un solo cambio con respecto a los once alineados contra Turquía y Suiza, con Di Lorenzo que sustituyó a Florenzi, tocado, se esperan al menos cinco sustituciones en la alineación contra Gales.
Belotti por Immobile en la delantera, Federico Chiesa por Lorenzo Insigne en la banda izquierda, Emerson por Spinazzola en el lateral izquierdo y Toloi por Di Lorenzo en el carril derecho son modificaciones probables. También podría tener minutos el joven delantero Giacomo Raspadori, del Sassuolo, la gran sorpresa de la lista.
Mancini insistió mucho en los últimos días sobre el hecho de que su plantilla cuenta con “26 titulares” y que está convencido de que, más allá de los cambios, la prestación seguirá siendo de alto nivel.
De momento, Italia arrancó con el pleno de puntos y seis goles a favor por cero en contra. Lleva 21 años sin cerrar una fase de grupos perfecta, con nueve puntos de nueve. La última vez fue en la Euro de 2000, cuando los azzurri perdieron la final contra Francia.
Enfrente, Italia tendrá a un Gales que se confirmó sólido, unido y competitivo, liderado por un jugador de nivel top como Gareth Bale, protagonista con dos mágicas asistencias en el triunfo 2-0 logrado contra Turquía tras el 11 contra Suiza.
El extremo de propiedad del Real Madrid, pese a fallar un penalti ante los turcos, enciende la luz en el equipo de Robert Page, que fue semifinalista en la edición de 2016 tras eliminar a Bélgica en los cuartos de final.
Será, evidentemente, titular ante Italia junto a Aaron Ramsey, un centrocampista que conoce muy bien a los italianos, al competir en la Juventus.
Falto de continuidad en su club, a causa de una interminable serie de problemas físicos, Ramsey anotó un gran gol a pase de Bale ante Turquía y alimenta las esperanzas de Gales de salir del Olímpico de Roma con al menos un punto.