Al-Zahara insta a constituir ya la Comisión contra el Cambio Climático
● La federación ve urgente solucionar las trabas para instalar placas en el Casco Histórico
La Federación de Asociaciones Vecinales Al-Zahara ha reclamado al Ayuntamiento el cumplimiento de iniciativas para que la ciudad colabore en la lucha contra el cambio climático y esté preparada para luchar contra los fenómenos adversos que este drama planetario está multiplicando y “ya afectan” a la ciudad.
Al-Zahara recuerda que la actual Corporación aprobó por unanimidad la declaración de emergencia climática y, más adelante, la elaboración de un Plan Municipal contra el Cambio Climático que impulsaría una comisión técnica para “continuar con el trabajo realizado por la Delegación de Infraestructuras, Sostenibilidad y Medio Ambiente”, todo ello dotado de una partida en las cuentas municipales del 2021.
Sin embargo, “se desconoce por qué no está ya en funcionamiento” este nuevo órgano municipal, aprobado en el Pleno de noviembre de 2020, algo en lo que la junta directiva de Al-Zahara ve “el poco interés que aún despierta en nuestra administración más cercana el tema del cambio climático”.
La situación es aún más preocupante porque los efectos de esta degeneración del clima “ya los estamos padeciendo”, con cada vez más frecuentes y graves episodios de altas temperaturas, lluvias torrenciales, etcétera.
Mientras, permanecen sin solucionar cuestiones como “el fomento del autoconsumo eléctrico con renovables, reducir la demanda de energía hasta consumos sostenibles, asegurar el aumento de la eficiencia energética, afianzar la compra pública sostenible, desarrollar medidas concreta de adaptación al cambio climático en los barrios, actuaciones de sensibilidad y formación ciudadana e incorporar principios de igualdad de género en todas estas estrategias y acciones.
Al-Zahara afirma que ya hay problemas encima de la mesa que no pueden esperar más. Entre estos, la avalancha de solicitudes para la instalación de plantas fotovoltaicas en terrenos agrícolas, que pese a suponer un impulso a las energías renovables y “ser parte de la solución frente a la crisis climática y la energética, no puede hacerse a cualquier precio y sin la participación ciudadana”, con riesgo para la biodiversidad y de que esta tecnología “salvadora” acabe siendo parte del problema y no de la solución.
La situación es aún más grave porque, mientras tanto, “parece incoherente mantener trabas para poner placas solares en tejados y azoteas de gran parte de la ciudad”, como denuncia el vecindario de La Axerquía, bajo unas normas de restricciones en el Casco Histórico que no hacen distinción.