Experiencias auténticas en Navidad
Alta gastronomía y patrimonio histórico se dan cita en la propuesta elaborada por Hospes Palacio de Bailío estas fiestas
Entorno histórico
El hotel se encuentra en una ubicación magnífica y entre sus paredes existen vestigios de varias culturas
LLEGAN los días en los que encontrar un lugar en el que reunirse para celebrar la llegada de unas fechas tan especiales y esperadas por todos no son tarea fácil. Más aún si lo que se pretende es que se trate de un día entrañable, de reencuentros y de confraternización más allá de la rutina diaria.
Son momentos que aprovechamos para citarnos con familia, amigos y compañeros de trabajo para pasar un buen rato, ponernos al día con el objetivo fundamental de disfrutar y celebrar.
De todas las opciones posibles que podemos encontrar en nuestra ciudad, los hoteles cada año van cogiendo fuerza como espacios en los que celebrar estos encuentros tan esperados. Entre todos ellos, el hotel Hospes Palacio del Bailío cada año ofrece diferentes propuestas orientadas a proporcionar una completa experiencia que permanezca en la memoria de todos.
Para lograrlo, el equipo de profesionales de Palacio del Bailío ha seleccionado cuidadosamente cada detalle navideño para que las celebraciones sean memorables y todo un éxito, haciendo que el ambiente envuelva y haga vivir la verdadera Navidad.
El chef Javier Moreno y su equipo han ideado una selección de platos con el objetivo de provocar en los comensales la vivencia de una experiencia que permanezca en la memoria, haciendo del entorno y los productos un momento destacado en estas fechas. Para ello han unido el producto local junto a técnicas y sabores foráneos de cuya combinación resultan unos platos que darán que hablar entre los comensales.
Así, se han diseñado experiencias para las celebraciones de empresas y reuniones sociales con menús de cócteles desde 18 euros, donde las suculentas y pequeñas piezas son las protagonistas; o más largos de hasta 35 euros. Los tradicionales y completos menús ideados especialmente para estas fechas rondan desde los 39 a los 45 euros.
De ellos, hay que destacar algunos de sus platos principales como el Lomo de atún salvaje con tomatitos marinados, gazpachuelo de aceitunas manzanilla y estragón, el Cochinillo ibérico, crema de coliflor trufada, aceitunas negras, pak choi y cebolleta fresca, o el casi tradicional Cordero lechal a la miel, parmentier láctica tikka masala, zanahorias escabe1,5,6y7. Algunas de las propuestas gastronómicas del chef Javier Moreno. 2. Detalle de la decoración navideña en las escaleras del Palacio. 3. Bodegones diseñados para embellecer el hotel. 4. Cada parte del hotel se viste para que el espíritu navideño quede impregnado en todos los rincones.
chadas y garbanzos fritos.
Quienes entienden que comer es algo más que el hecho natural de alimentar el cuerpo y buscan un elemento diferenciador que sume, más allá de los platos, encontraran que hacerlo en un comedor sobrio con un suelo transparente que permite observar los vestigios de una antigua casa romana y los frescos que la decoraban sin duda ayudan a que estemos ante una experiencia gastronómica novedosa y especial. De hecho existe la posibilidad de acceder a ella aunque su visita deberá ser consensuada con el personal del hotel ya que preservar esta parte tan relevante del Palacio es una de las máximas dentro del grupo hotelero.
De cara a las fechas más señaladas han optado por abrir la mente y hacer un viaje por un extenso bagaje gastronómico que lleva por un menú degustación inconformista, innovador, transgresor, iconoclasta e inspirador en el que se pueden encontrar los productos más exclusivos con elaboraciones de alta cocina donde se ha buscado la perfección y el sabor, preparado una gran variedad de platos para las galas del 24 y 25 de diciembre, la noche de Fin de Año, el Año Nuevo y los días 5 y 6 de enero. Por supuesto la llegada del nuevo año se celebra con la tradicional barra libre que estará disponible hasta las 02:00 de la madrugada, amenizada por música y el mejor ambiente.
Si todo esto ya es una celebración, que suceda en este Palacio situado en el corazón histórico de la ciudad califal, es un auténtico regalo para los sentidos. Declarado Bien de Interés Cultural, conserva a pesar de las reformas, todos sus espacios y que son reconocibles cuando te alojas en el hotel. El patio principal posee unas pinturas murales del siglo XVIII y un suelo acristalado que deja ver los restos arqueológicos romanos que hay bajo el hotel y que corresponden a una casa romana. El arte califal sirve de inspiración para la decoración de la galería y el Salón Castejón, que recuerda al mirhab de la Mezquita de Córdoba. Otro espacio a destacar dentro de este hotel palaciego es el patio de la Fuente de la Concha, del siglo
XVII, desde donde se accede a una habitación con uno de los frescos más importantes del palacio.
Si se opta por celebrar estos días como huésped del hotel hay que destacar que cada una de las 53 habitaciones tienen algo especial y distintivo, ya sea un arco, un cabecero o un estuco pintado a mano. De esta manera se redunda en el concepto de que estamos ante un espacio único, exclusivo y personal. Junto a esos guiños decorativos están las amplias camas vestidas con sábanas de hilo egipcio, los albornoces y muchos más detalles con los que se pretende agasajar al huésped haciendo que se sienta en un lugar acogedor y confortable. Existen categorías para todos los gustos y necesidades aunque las habitaciones más especiales son las tres Junior Suite Históricas con Alma, decoradas con frescos que recrean momentos históricos y con ornamentos originales del palacio. Además es el único Hotel con baños romanos interiores y piscina exterior ubicada en un oasis rodeado de árboles frutales y plantas aromáticas.
Por supuesto todas las características originales de la casa se han preservado merced a unos valiosos trabajos de restauración, por lo que todavía conserva elementos de gran belleza para comprender el pasado histórico de la ciudad de Córdoba. Su pinacoteca y sus frescos originales del siglo XVII en habitaciones y áreas nobles son de las peculiaridades más hermosas del palacio.
Los huéspedes y clientes que opten por visitar este palacio durante estas navidades podrán vivir una experiencia intensa y única, disfrutando de un hotel museo con encanto en nuestra ciudad.
Como punto final dentro de las opciones que ofrece este hotel, y para redondear
Experiencia completa La propuesta gastronómica une tradición con técnicas y sabores foráneos
la experiencia al completo, no puede faltar el momento de disfrute en su Bodyna Spa, que incluye acceso a unas termas romanas únicas en la ciudad y en las que disfrutar de relajantes masajes tailandeses o ayurvédicos.
Con estas nuevas propuestas lo que se pretende es ofrecer una nueva forma de vivir y disfrutar de la Navidad.