Enésimo fracaso de España
Cuando Luis Enrique dio la lista definitiva de los jugadores que iban al mundial de Qatar, me llevé la sorpresa de que tres delanteros que están en forma y que tienen más gol y pólvora, como son Aspas, Gerard Moreno y Borja Iglesias, no estaban en esa lista, añadiendo que Kepa es mucho mejor portero que Unai Simón. Luego, cuando arrancó el Mundial frente a Costa Rica, ese gol apareció, pero en los tres últimos partidos a España le costó marcar, dando muestras de que a la selección le faltaban esos tres delanteros más la ansiada titularidad de Ansu Fati en el lado izquierdo del frente del ataque español. Me pareció sorprendente que Luis Enrique no hiciera jugar a la selección tal y como lo hizo en el Barcelona, cuando jugaba con transiciones rápidas, velocidad al balón y verticalidad total, con un centro del campo que en segunda línea siempre tenía oportunidades y marcaba goles. Así rompía todas las defensas del rival e hizo al Barcelona ganar por segunda vez un sextete. Esto no lo plasmó en España. A España le faltó eso y lo ha pagado muy caro en el Mundial, pero sé que esta generación de jugadores jóvenes tienen una calidad indiscutible y dentro de tres años y medio seguro madurarán.
Mister Chip dijo que, después de ser campeona del mundo en el Mundial de Sudáfrica, España ganó tres partidos y luego empates y eliminaciones, muy pobre bagaje de la selección. La elección de Luis de la Fuente, que conoce al 80% de los jugadores convocados y que posee títulos en categorías inferiores, ha sido un gran acierto, ya que juega al ataque con verticalidad en el juego y posesión del balón eficaz, mientras Marcelino es un entrenador algo más defensivo, falto de títulos. O Roberto Martínez, que aunque haya colocado a Bélgica como tercera del pasado Mundial y haya fracasado en este con una selección muy veterana, su juego es vertical, alegre y ofensivo total, algo que nuestra selección necesita sí o sí. Rafael Mestanza Cabrera.