Críticas por las aglomeraciones en las Cruces de Santa Marina
● Los vecinos avisan de los problemas de seguridad en la zona y dicen que sufren un ‘efecto cárcel’
Miles de personas, jóvenes en su mayoría, colapsaron en la noche del viernes la plaza Conde de Priego, en el corazón del barrio de Santa Marina, en la primera noche de celebración de las Cruces de Mayo. Tal y como denunciaron los vecinos a través de un vídeo, la plaza se convirtió en una discoteca mientras los asistentes bailaban y cantaban al ritmo de Torero de Chayanne.
Este enclave se quedó pequeño para la cantidad de personas que acudieron hasta él, de forma que se llenaron también las calles aledañas y llegaron hasta la misma puerta de la iglesia. Debido a esto, el Ayuntamiento se vio obligado a cortar al tráfico rodado la calle Santa Isabel.
La asociación vecinal La Fuenseca, Santa Marina y Orive ya había denunciado el “efecto cárcel” que provoca la masificación de personas en torno a la Cruz de Santa Marina a los residentes de la zona que, según indicaron, “se ven imposibilitadas de atender una eventual urgencia sanitaria o de bomberos, amén de la casi imposibilidad de acceder o salir de sus viviendas”.
“Hay más de cien viviendas en la plaza y viven todo tipo de familias, personas mayores generalmente. Ni siquiera un equipo médico podría pasar cuando la aglomeración cubre la plaza en su totalidad”, advirtió la asociación.
El vídeo, que se hizo viral, generó numerosas críticas. El grupo municipal Hacemos Córdoba mostró su “preocupación” ante las imágenes, pues el aforo “hacía imposible un desalojo de urgencia”. Desde la coalición de izquierdas mostraron su apoyo a los vecinos y vecinas de la zona, que “no podían acceder a sus viviendas ante la falta de espacio por las miles de personas que llenaban la plaza de Santa Marina y sobre todo la plaza Conde de Priego, donde se producía un efecto cárcel”.
Desde la coalición mostraron su “preocupación” por la deriva que está tomando la fiesta de las Cruces de Mayo, sobre todo por la “falta de medidas de seguridad, la suciedad y la insalubridad” que en torno a esta plaza de Córdoba, “y todo por la inoperancia del gobierno municipal, con su alcalde a la cabeza”.
“La imagen nos preocupa y esperamos que no tengamos que lamentar algo por la falta de decisión y de gestión del alcalde y del delegado de Fiestas y Tradiciones”. Es “fundamental que el alcalde se preocupe por la seguridad de la ciudadanía y por mantener viva la esencia de estas fiestas de mayo, que son esenciales para el desarrollo económico de la ciudad pero también para mantener y consolidar nuestra imagen como destino turístico y cultural de primer nivel”.
Hacemos Córdoba insistió en que la “falta de planificación y de medidas adecuadas de seguridad pueden poner en riesgo la celebración de estas festividades, así como la seguridad y el bienestar de los ciudadanos y ciudadanas”.
La coalición de izquierdas confió en que el gobierno municipal tome “las medidas necesarias para garantizar que este tipo de situaciones no se repitan y que podamos seguir disfrutando de nuestras tradiciones de manera segura y responsable”.
Mientras, el portavoz del PSOE, Antonio Hurtado, instó a “replantearse el modelo” de las Cruces de Mayo porque “el riesgo ante una situación de emergencia para los vecinos es inadmisible”. Hurtado señaló que “la tradición se ha desvirtuado” y provoca “inseguridad, malestar y molestias” a los vecinos de las zonas donde se colocan estas instalaciones florales que van acompañadas de barras y música. “Desde el PSOE nos ofrecemos a colaborar para abordar los cambios necesarios en la celebración de las Cruces de Mayo para que recuperen su esencia y sigan formando parte de nuestro acervo cultural y festivo”, indicaron.
En opinión del portavoz del PSOE, “hemos de ir hacia un modelo más seguro, más sostenible, de mayor respeto a nuestra tradición y compatible con el derecho al descanso de los vecinos”. En esa línea, añadió que “en lo que han derivado las Cruces de Mayo no beneficia a nadie, ni a quienes generosamente montan las cruces, ni a quienes nos gusta disfrutarlas, ni a Córdoba como Ciudad Patrimonio de la Humanidad”.