La perla del monte se sube a la banda ancha
Trufbox mejora sus ventas ‘online’ un 200% en el año de la pandemia y acerca ya trufa de temporada a un millar de particulares y más de un centenar de restaurantes
“Por la triste razón del Covid, la gente ha cocinado mucho más en casa y se ha puesto las pilas de un modo especial en la búsqueda de productos naturales”, afirma Marta de Pablo Velado, especialista en marketing digital, analista de negocio y gerente de esta pequeña empresa que partía en el inicio de la pandemia con una clara ventaja competitiva: “Hemos hecho un especial esfuerzo para tener el terreno abonado y contamos con una web asentada, con una clientela fiel y en, posicionamiento web, estamos a la par que otras con más músculo”, señala para explicar cómo la confluencia de estos dos factores han lanzado las ventas online de sus trufas.
Eso sí, en ese caso tampoco todo el monte es orégano. Y es que, este formidable dato, afirma quien además acaba de convertirse en accionista mayoritaria de Trufbox, no ha servido sino para, precisamente, compensar de alguna manera la caída -igualmente fuerte-, de las compras provenientes de la restauración; una demanda que, no obstante, comienza a remontar a la par que se levantan las restricciones.
A despegar en exportaciones
Con el verano a vistas, el canal Horeca comenzó a solicitar con cierta alegría el apreciado hongo; trufa que, en el caso de la dispensada por Trufbox es siempre de temporada y, en la época que nos ocupa, trufa de verano, en este caso producida de forma natural y silvestre y recogida en montes de Soria. No es la mejor -la trufa blanca de Alba o del Piamonte es la más exclusiva y apreciada, llegando a pagarse la temporada pasada a 1.900 euros el kilo, ni tampoco puede competir con la intensidad de la trufa negra, pero ésta de verano es más económica -su precio actual ronda los 240 euros por kilo-, y ese es un factor de peso para que las ventas de la perla del monte en restauración reafirmen esa remontada.
También espera Marta de Pablo que se recuperen las ventas al exterior, muy resentidas igualmente por la pandemia, pero que constituyen un importante nicho para un país como el nuestro, uno de los principales productores de la variedad negra, que no sólo logra los mejores parámetros de calidad en los bosques españoles -especialmente en zonas de Soria, Teruel, Huesca y Alto y Bajo Maestrazgo-, sino que, además, se puede considerar un diamante en bruto con grandes perspectivas de crecimiento pues no se llega a cubrir su demanda mundial.
Con ese potencial en el punto de mira, Trufbox ha comenzado a trabajar con el Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León, junto al que prevé abrir nuevas vías de exportación a países árabes, de América Latina y Asia, con los que diversificará unas ventas hasta ahora más centradas en Portugal, Andorra, Alemania, Holanda, Francia y por supuesto, España.
Trufbox apuesta también por el ‘trufiturismo” ofreciendo experiencias únicas para conocer la trufa y conectar con el entorno natural y la gastronomía. Una propuesta diferente también para eventos de empresa.