El Economista - Agua y Medioambiente
El Plan Nacional del Agua se aprobará antes de verano
La directora general del Agua, Liana Ardiles, ha asegurado que comenzarán las reuniones con las distintas fuerzas políticas para conseguir que en junio el pacto sea una realidad
El Gobierno quiere dar comienzo a las reuniones con las distintas fuerzas políticas para alcanzar el mayor consenso posible
Antes de verano. Este es el objetivo temporal que se ha marcado el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente para tener aprobado el Pacto Nacional del Agua, un documento que, según ha destacado la directora general del Agua, Liana Ardiles, “iniciará un camino de largo plazo para lograr un uso más eficaz, sostenible y solidario entre todos los españoles”. Tras haberse celebrado más de 120 reuniones con todos agentes políticos, sociales y económicos que se verán afectados por este Pacto Nacional del Agua, ahora le llega el turno a la negociación política. A finales
de enero comenzaron, según apunta Ardiles, las reuniones con los distintos partidos políticos, “ya sabiendo lo que quiere cada uno y lo que cada uno está dispuesto a pactar”.
Previamente, y tras el lanzamiento a consulta pública de los planes especiales de sequía el pasado 21 de diciembre, el Ministerio espera aprobar los mismos en primavera, lo que servirá para “saber dónde estamos cada uno”, explica la directora general del Agua.
No va a ser un camino fácil, y todo a pesar de que Ardiles considera que entre los planes hidrológicos de las cuencas que se aprobaron en 2016 y los planes especiales de sequía quedarán claras las posturas de todos los agentes implicados en el sector del agua. Sin embargo, el Gobierno quiere que la normativa que se tenga que actualizar pueda desarrollarse a lo largo del último trimestre del año. “¿Por qué no aprobarse en septiembre?”, se pregunta Ardiles, “porque para poder llevar a cabo lo que se pacte, hay que llevarlo a la normativa. Tenemos una Ley de Agua muy potente, pero se necesita actualizar. Si se aprueba antes de verano, en septiembre seremos capaces de tramitar una ley para que en 2018 tengamos una oportunidad de hacer una tramitación normativa completa”.
Los cuatro ejes del Pacto Nacional del Agua
El futuro Pacto Nacional por el Agua se basa en cuatro ejes fundamentales. El primero de ellos es el cumplimiento de los objetivos medioambientales para la adecuada conservación de los ríos y los ecosistemas acuáticos. El Ministerio plantea que “se adopten medidas destinadas a atender todos aquellos objetivos ambientales asociados al saneamiento y depuración en todos los ámbitos competenciales”, indica la directora general del Agua. En el ámbito del Estado, se enmarca en el Plan de Medidas para el Crecimiento, la Competitividad y la Eficacia ( Plan Crece) que impulsa el Ministerio desde 2014 y que garantiza unas inversiones de unos 1.200 millones de euros hasta 2020. Además, el Ministerio también propone alcanzar una serie de acuerdos medioambientales para la protección de espacios emblemáticos en los distintos territorios, así como avanzar en la concertación de los caudales ecológicos.
El segundo eje es la atención de los déficits hídricos, haciendo hincapié en las infraestructuras, la optimización de los regadíos, y la adopción de medidas encaminadas a conseguir un mayor ahorro de agua. En este sentido, Liana Ardiles recuerda que hasta 2021 están garantizados 1.200 millones con fondos europeos para cumplir tanto las obligaciones que le corresponden al Gobierno estatal como a los autonómicos.
El tercer eje es la puesta en marcha de los Planes de Gestión del Riesgo de Inundación, para mejorar la adaptación al cambio climático y llevar a cabo una serie de actuaciones estructurales en las infraestructuras hidráulicas, así como poner en marcha una línea ambiental para impulsar proyectos de adaptación.
Y, por último, el cuarto eje recogerá todas aquellas medidas en materia de gobernanza del agua, con el objetivo de que garanticen el cumplimiento de los compromisos políticos y jurídicos asumidos con la Unión Europea, especialmente aquellos que doten al sistema español del agua de suficiente estabilidad económico-financiera. “Nadie quiere pagar más, pero todo el mundo quiere un servicio mejor, gratis. Y esto no puede ser”, explica la directora general del Agua.
El objetivo final del Ministerio es “un Pacto que sea fruto de la implicación de todos, con generosidad, con realismo y vocación de permanencia”, concluye Ardiles.