El Economista - Agua y Medioambiente
JOSÉ ALBERTO CARRASCO
En 2018, un grupo de directivos de la quebrada Isolux Corsán compraron una cartera de obras de la extinta empresa para poner en marcha Lantania. Un año después, esta compañía ha superado las previsiones que los directivos habían realizado, y conseguirá cerrar este año con una facturación por encima de los 100 millones de euros, una cartera de proyectos de 110 millones, con la vista puesta en dar el salto al exterior en 2020. En el sector del agua y del medio ambiente, la compañía aún tiene mucho camino que recorrer, con solo dos proyectos en cartera. Sin embargo, entre sus planes se encuentra la adquisición de una compañía dedicada al sector industrial con el fin de que, el año que viene, la división de agua represente el 20 por ciento de la cifra de negocio anual de Lantania.
El grupo Lantania se fundó en septiembre de 2018, ¿qué balance hace de este primer año de actividad?
El primer año ha sido para nosotros un año bastante positivo. Vamos a alcanzar en números genéricos los 100 millones de facturación, con un ebitda esperado de 10 millones y con una contratación muy por encima de los objetivos y de las expectativas iniciales, porque no era fácil para nosotros volver a ganarnos la confianza de los clientes, tanto de la administración
“Haremos una operación corporativa que nos dé volumen en agua y que esté orientada al cliente industrial”
muy poca licitación. Las inversiones que tienen previstas tanto la Dirección General del Agua como las distintas entidades que dependen de ella son muy importantes, pero prácticamente no han licitado nada. La Dirección General del Agua que debería ser el principal órgano inversor, ha licitado este año 50 millones, y tiene inversiones previstas por más de 400 millones, pero ahí están pendientes de aprobaciones técnicas o de presupuestos generales. Por ejemplo, el Canal de Isabel II, que sí que es un ente más inversor, hasta ahora no ha licitado demasiado, pero ahora se van a lanzar en diez lotes para toda la Comunidad de Madrid por importe de 600 millones, y nosotros estaremos ahí con dos empresas también importantes del sector, en UTE. Vamos con Ortiz y con Licues, para las licitaciones de los lotes del Canal de Isabel II, que es son 10 lotes, algunos de 90 millones.
¿Cuál es punto fuerte de Lantania en el sector del agua y el medio ambiente?
En estos ámbitos, nosotros nos hacemos valer sobre todo por la experiencia del personal, subrogado inicialmente, que venía de Isolux Corsán, y sobre todo en una oficina técnica que pocas empresas, desde luego las que son comparables a nuestro tamaño, no la tienen. Ni siquiera las grandes tienen una oficina técnica dimensionada como la tenemos nosotros. Eso es una inversión en capital humano en capital humano que cuesta rentabilizar.
Si cuesta rentabilizarlo, ¿por qué apuestan por esta dimensión de la oficina técnica?
Porque eso nos da el valor añadido de cara al cliente. Ahora estamos en dos obras importantes en agua y medio ambiente, una es la EDAR de Nerja y la otra es la presa de Almudévar. En esta última, que es ahora mismo la presa de materiales sueltos más grande que se está construyendo en España, estamos en UTE con Sacyr, con Vías y con Sogeosa. Latania es la empresa más pequeña de todas, pero todas las relaciones con el Ministerio, con la dirección de obras y dirección facultativa, las lleva nuestra oficina técnica. Las otras empresas no tienen esa figura desde el punto de vista geotécnico y ni hidráulico. Y eso el cliente lo valora. Para nosotros es una inversión.
Además de estas dos obras, ¿en qué otros proyectos de agua y medio ambiente está Lantania?
Ahora mismo, además de esos dos proyectos, estamos pendientes de
arrancar, pero no está iniciada todavía, una obra con Acuamed, la conexión de depósitos de Almería. Son los tres proyectos de agua y medio Ambiente que tenemos en cartera ahora mismo.
¿Qué previsiones de crecimiento de proyectos tiene? Comentaba los lotes del Canal de Isabel II…
La licitación pública depende de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado. Tenemos todas las licitaciones localizadas y estaremos en ellas. Pero para nosotros también es muy importante el sector privado. En esta parte, por un lado, estamos analizando alguna operación corporativa, que nos pueda dar un crecimiento inorgánico en esa parte, y que espero que esté cerrado en breve.
“El sector público será el 60% del negocio de agua con la adquisición”
¿Qué busca la empresa con esa adquisición?
Lo que queremos es que nos de volumen y que esté, sobre todo, orientado al cliente industrial, que necesita mucho tratamiento de las aguas en la industria. Queremos que nos de a nosotros un tamaño de entorno al 20 por ciento de nuestra cifra de negocio anual. Es decir, entre 20 y 25 millones de facturación. Esto sería un tamaño de negocio combinado, entre lo que aporte la nueva empresa, nuestro volumen esperado y las licitaciones que esperamos conseguir. Sería una operación de cerca de 15 millones de euros.
“El negocio de agua aportará el 20% de la cifra de negocio”
¿Cuándo estaría cerrada?
Siendo muy optimistas, antes de finales del año, pero sería muy optimista. Estamos en conversaciones muy avanzadas. No solo en la parte de agua y medioambiente, sino que también en otros sectores estamos en conversaciones con otras empresas. A principios de año adquirimos la parte de servicios de Velasco, y siempre estamos analizando posibles opciones y alternativas.
“En los nichos de negocio privado, cuando entras, es más fácil mantenerse”
De momento, la cartera de proyecto de Lantania en el sector del agua es 100% público. Con esta operación, ¿qué peso tendrá el sector privado en el negocio de agua?
Sería un 60 por ciento público y 40 por ciento privado en un año. Esas magnitudes estarían bien. Las grandes licitaciones son públicas pero hay muchísima competencia, y en los nichos de negocio privado, si consigues entrar, son menos llamativos a nivel de volumen de negocio, pero es más fácil mantenerse.
sin control. Debe ser escalonada y por fases. En una primera fase hablábamos de estos países de Europa, después, dentro de unos dos años, ver Latinoamericana, por último, Estados Unidos y Canadá.
¿Cómo se va a financiar?
No es fácil, porque las adquisiciones que hemos realizado hasta ahora, como la de Velasco, se han hecho con el flujo de caja generado por el negocio, sin aumentar el endeudamiento.
La empresa ha tenido un crecimiento significativo en un año en el que prácticamente la inversión pública ha sido nula, ¿qué ritmo de crecimiento esperan una vez que se reactive la inversión?
Nuestras expectativas al año 2022 es estar en una facturación de 145-150 millones de euros. Tiene pinta de que vamos a alcanzar esa cifra antes, pero de momentos tenemos que ceñirnos a nuestro plan estratégico.
¿Qué tipo de proyectos del sector del agua interesan a Lantania?
Desde el punto de vista de construcción, todo tipo de proyectos, desde abastecimiento, estaciones de depuradoras de agua, de tratamiento, de saneamiento, redes de colectores. Hay entidades que licitan la redacción del proyecto y la obra, y nosotros podemos hacer las dos cosas. En cuanto a la parte de mantenimiento, es algo que nos interesa, sobre todo por la adquisición que hemos realizado de la división de servicios de Velasco. Siempre nos va interesar mantener y explotar estaciones y tratamiento y depuradoras. No dejan de ser servicios y si lo has construido tú, es mucho mejor que seas capaz de explotarlo tú. Son proyectos a largo plazo, pero también bastante intensivos en mano de obra y también con unas especificaciones técnicas cada vez más difíciles de cumplir.
El equipo proviene de Isolux Corsán, ¿qué diferencia a Lantania de la antigua empresa?
No tenemos nada que ver con Isolux Corsán,que facturaba 3.000 millones y estaba en 55 países, nosotros hoy facturamos 100 millones y estamos en España. Aquello era un monstruo desde el punto de vista de la toma de decisiones, había infinitos niveles, y aquí somos 6 directivos, y vamos a ver cada uno de los clientes habitualmente, saben quiénes somos.
“No podemos plantearnos una expansión internacional sin control”
“Las adquisiciones se han hecho sin aumentar la deuda”
“Nuestras expectativas a 2022 es facturar entre 145 y 150 millones”