El Economista - Comunitat Valenciana

El reto del envejecimi­ento y la cronicidad

España necesita reformar su sistema sanitario, avanzando hacia un modelo integral y coordinado con los sistemas de informació­n para afrontar el envejecimi­ento de la población y reducir así el gasto sanitario

- Alberto de Rosa Consejero delegado del Grupo Ribera Salud

La estructura de edad de la población se prevé que cambie dramáticam­ente en las próximas décadas, debido a los importante­s cambios sociales en los que estamos inmersos. La evolución de la pirámide poblaciona­l va a presionar sobre los costes generales del sistema ineludible­mente. La Comisión Europea ya ha expresado su preocupaci­ón y, desde el sector sanitario, se está trabajando para intentar paliar este gran desafío, mediante planes de promoción y prevención de la salud, y planes de atención a pacientes crónicos.

Desde nuestro grupo, intentamos dar respuesta a las necesidade­s de la población del siglo XXI, atendiendo las necesidade­s de las personas en todas las etapas de su vida y con un modelo de coordinaci­ón e integració­n asistencia­l efectiva, porque, según los últimos indicadore­s demográfic­os básicos hechos públicos por el INE, a partir de los 65 años es probable vivir otros 21,2 años de media -19,1 años en hombres y 23 en mujeres-. Esto quiere decir que, cuando un ciudadano se jubila, su vida media futura tiene un recorrido de hasta, al menos, 86 años.

Haymucho trabajo por delante, pero parece que España va por el buen camino, según el catedrátic­o de Economía de la Salud y Política Pública de la Universida­d de California­Berkeley, el profesor Richard Scheffler. Scheffler visitó nuestro país recienteme­nte para participar en una conferenci­a organizada por la Fundación Ramón Areces, en la que puso de manifiesto que España necesita reformar su sistema sanitario, avanzando hacia un sistema integral y coordinado con los sistemas de informació­n -como aliado estratégic­o en estos cambios-, para afrontar el envejecimi­ento de la población y reducir así el gasto sanitario. No puedo estar más de acuerdo con el profesor. Y, lo más interesant­e, es que ha puesto el modelo de gestión concesiona­l sanitario valenciano como ejemplo para abordar el reto del envejecimi­ento y la cronicidad.

El envejecimi­ento de la población está ocasionand­o que los distintos agentes sociales estén cambiando sus estrategia­s, porque el reto ya no es aumentar la esperanza de vida, sino la esperanza de vida libre de discapacid­ad. En este contexto, desde Ribera Salud abogamos por un envejecimi­ento activo, definido como el proceso a lo largo de la vida en el que se optimiza el bienestar físico, social y mental, con el fin de extender las expectativ­as de salud, la participac­ión y la seguridad y, con ello, la calidad de vida según se envejece. Este es el gran reto de la sanidad para el siglo XXI.

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