MÉXICO BUSCA INVERSIÓN PARA CRECER Y CREAR EMPLEO

Energía, telecomunicaciones y tecnologías de la información, obras públicas, industria química y de bienes de equipo son algunos de los sectores que ofrecen mayor potencial para los inversores

México es la decimocuarta economía del mundo y segunda de Iberoamérica -detrás de Brasil- y cuenta con una posición privilegiada, por su frontera con Estados Unidos y sus líneas costeras. El país dispone de numerosas ventajas para las inversiones extranjeras, como su unión aduanera -Tratado de Libre Comercio- con Estados Unidos, unas finanzas sanas, deuda pública baja, inflación controlada y un sistema bancario sólido, además de su progresiva apertura a la inversión privada. El país da prioridad a las infraestructuras, la educación y la seguridad pública, buscando el crecimiento, la creación de empleos y una mejora de la situación social. En esta línea, existe una estrategia para luchar contra el crimen organizado, ya que la violencia se considera un obstáculo para el desarrollo. EEUU es el principal socio comercial de México, siendo destino del 80 por ciento de sus exportaciones y origen del 48 por ciento de sus importaciones. Además, hay que destacar que cinco países asiáticos -China, Japón, Corea, Taiwán y Malasia- se encuentran entre los diez primeros proveedores de México. Entre los europeos, destacan Alemania, Italia y España. También ocupan posiciones relevantes Canadá y Brasil. Como clientes, al margen de EEUU, destacan, en orden de importancia, Canadá, China, Brasil y Colombia. España se encuentra en sexta posición, mientras que, para la Comunidad Valenciana, México es el primer destino de las exportaciones a Latinoamérica. Los principales sectores de interés en México son, por un lado, aquellos donde se desarrollará una apertura a la inversión privada, como energía y telecomunicaciones. El sector de las energías renovables ofrece grandes oportunidades y las empresas españolas están tomando posiciones, sobre todo, en el sector eólico y, más recientemente, en el solar. Por otro lado, aquellos en los que se están ejecutando importantes obras públicas -aeropuertos, carreteras, petroquímica, telecomunicaciones, sanidad, tratamiento de residuos, agua, etcétera-, muchas de ellas recogidas en el anteriorPrograma Nacional de Infraestructuras y que se contemplarán también en el nuevo plan. También la industria química y la de bienes de equipo disponen de un mercado con un tamaño y dinamismo atractivo en México.