Con un agosto seco de pagos, toca esperar a Ence y BME en septiembre
Con un mes de agosto prácticamente vacío de pagos –al scrip de Iberdrola del día 1 ya no es posible llegar si no se es accionista, ya que la fecha de corte fue el 4 de julio–, los buscadores de dividendos españoles no tienen más remedio que dirigir la mirada hacia septiembre. Será entonces cuando retribuyan a sus inversores, según las previsiones del consenso de mercado que recoge Bloomberg, Ence y BME, dos de las integrantes –al igual que Iberdrola– del EcoDividendo, la estrategia de elEconomista que recoge los pagos próximos más rentables.
Quienes decidan entrar en Ence para cobrar este dividendo, esperado para el 11 de septiembre, lo hacen en la compañía más bajista del Ibex: se desploma en el año en torno a un 29 por ciento, lo que eleva la rentabilidad de su próximo pago, que se espera que ascienda a 0,11 euros, hasta el 2,8 por ciento. La papelera tiene a su favor una recomendación de compra por parte del consenso de mercado que recoge FactSet que data del pasado mayo, y un potencial alcista en bolsa cercano al 50 por ciento: los analistas ven sus títulos en los 5,82 euros.
Tres pagos anuales
La compañía suele repartir tres dividendos al año: dos a cuenta, y uno complementario. Éste sería el primero de las entregas a cuenta del ejercicio de 2019. A estos 0,11 euros se sumarán otros 0,11 en diciembre (del que sería su segundo dividendo a cuenta), y 0,11 más ya en abril de 2020, que corresponderían
Dividendo destacado
al complementario. La retribución total con cargo a 2019 alcanzaría, por tanto, los 0,33 euros, que en los niveles actuales de cotización implican una rentabilidad del 8,4 por ciento. Ence tiene un pay out (porcentaje del beneficio destinado a retribuir a sus accionistas) próximo al 50 por ciento.
El primero de BME con cargo a 2019
Un día antes, el 10 de septiembre, espera el mercado que pague su dividendo Bolsas y Mercados Españoles (BME), el gestor de las bolsas, que previsiblemente repartirá 0,40 euros, que rentan un 1,9 por ciento. Sin haber sufrido un desplome tan llamativo como el de Ence, el valor cede en bolsa casi un 13 por ciento en 2019, lo que aumenta el atractivo de esta entrega. El grupo encadena, hasta 2018, cuatro años consecutivos de beneficios a la baja, lo que ya se ha dejado notar en el importe de sus pagos, y el consenso de mercado que recoge FactSet espera que en el presente ejercicio esa tendencia continúe: prevé que sus ganancias retrocedan un 4,7 por ciento, hasta los 130 millones; pero, eso sí, estima que desde ese punto subirán hasta los 133 millones en 2020.
Éste sería el primero de sus tres dividendos con cargo a las cuentas de 2019; en total, y de acuerdo con las previsiones recogidas por Bloomberg, abonará 1,57 euros por acción frente a los 1,78 euros del ejercicio anterior, lastrado por esa caída en los beneficios.
El otro lastre con el que carga esta compañía es la recomendación de venta que recibe desde hace ya varios años por parte del consenso de mercado que recoge FactSet.
LA PAPELERA, QUE LUCE UN COMPRAR, SE DEJA CERCA DE UN 20% DE SU VALOR EN EL PARQUÉ EN LO QUE VA DE AÑO