La Fed, presionada para bajar los tipos el miércoles

El mercado descuenta un nuevo recorte pese a la división interna palpable en el seno de la institución

Todavía con la resaca de la reunión del Banco Central Europeo (BCE), los mercados afrontan la próxima semana otra cita clave: el encuentro de la Reserva Federal estadounidense (Fed). Después del recorte de tipos de julio, en primero desde 2008, es evidente que existe una clara división de posturas que hacen difícil calibrar el rumbo de la política monetaria a este lado del Atlántico. De momento, para esta reunión, el mercado descuenta claramente una nueva rebaja de 25 puntos básicos, hasta situarlos en el rango del 1,75 y 2 por ciento.

Aunque la Fed cuenta con un mayor margen de actuación en relación al que tiene el BCE, con los tipos de referencia en el 0 por ciento, lo cierto es que en este ciclo el banco central estadounidense dispone de menos espacio que en otras ocasiones. Cuenta con 225 puntos básicos de munición si quisiera llevar los tipos a ese 0 por ciento, por lo que los miembros de la institución combaten entre ellos para asegurarse que los recortes se aplican con cierto juicio.

Son varios los halcones que buscan frenar las expectativas. Esther George, presidenta de la Fed de Kansas Citi, y su homólogo en la Fed de Boston, Eric Rosengren, ambos con poder de voto, ya disintieron el pasado julio y seguramente volverán a hacerlo el próximo miércoles. Patrick Harker, presidente de la Fed de Filadelfia, también reconoció que aceptó el abaratamiento del precio del dinero de julio “a regañadientes”.

A ello se unen las presiones del presidente de EEUU, Donald Trump. Esta semana en Twitter incidió en que los “descabellados” miembros de la Fed deberían reducir los tipos de interés a cero “o menos”. Nada más conocer las nuevas medidas del BCE, Trump criticó que “la Fed espera, espera y espera”, mientras Draghi tiene “éxito” en la depreciación del euro contra el dólar.