“Sin ninguna duda podríamos hacer frente a otra operación de gran calado”
A pesar de la fuerte subida del valor en el año, desde Cellnex defienden que la compañía tiene capacidad para seguir haciendo camino, gracias a la combinación de una visibilidad elevada de los ingresos y un fuerte crecimiento en la demanda de datos
Con un crecimiento meteórico en bolsa, Cellnex es la gran estrella del Ibex 35 en el año. La de la firma de torres de telecomunicación es una historia de adquisiciones que replica lo sucedido en el sector al otro lado del charco y que, de momento, la levanta a la quinta posición por capitalización entre las teleco de la eurozona. Para José Manuel Aisa, CFO de Cellnex, muchos inversores apostaron por ella “intentando jugar a la opcionalidad” de que sucediese lo mismo que ya había pasado en EEUU. Hace solo unos meses la empresa ha cerrado la operación más grande de su historia –con 4.000 millones– y acaba de entrar en Irlanda –con 546 torres que se ampliarán en 600 más hasta 20206– con la compra de Cignal por 210 millones, pero tiene capacidad para más: “Si aparece otra operación de calado podríamos hacerle frente”, explica Aisa.
Tras la subida del 77 por ciento en el año, ¿qué motivos hay para confiar aún en Cellnex?
La principal idea es que nosotros somos una empresa de infraestructuras que tenemos un mercado subyacente, el de la información, y que lo que estamos viendo es que cada vez hay más movimiento de datos, ya no solo entre personas sino entre objetos. Evidentemente este movimiento necesita infraestructuras. Creo que este gran crecimiento las telecos no pueden hacerlo solas, van a necesitar la colaboración con distintas empresas como puede ser Cellnex. Al final, el principal motivo es que hay una demanda que crece.
El gran catalizador son las adquisiciones. Antes de la operación con Illiad y Salt se hablaba de 11.000 millones en oportunidades. Hay quien dice que es conservador...
Dimos ese dato en febrero cuando hicimos la ampliación de capital y 4.000 millones ya se han comprometido. Los 7.000 millones restantes siguen estando ahí. Es cierto que, a la vez, estamos viendo cómo los grandes operadores europeos dicen que se están planteando qué hacer con su infraestructura pasiva, que da soporte a este crecimiento de datos. No sé si se esa cifra se va quedar corta. En los últimos 4 años hemos comprometido inversiones por 8.000 millones. Sale un ritmo de unos 2.000 al año, esto no tiene por qué parar.
Si apareciese otra oportunidad de gran calado, ¿hay capacidad para abordarla?
Tenemos líneas de crédito y tesorería por unos 5.500 millones. Podríamos pagarla. ¿Sería razonable pagarla sólo con tesorería o con deuda? Quizás no. Hay otros instrumentos como un socio para compartir la inversión, también podemos volver al mercado de equity... Hemos abierto muy pocas veces el capital de nuestras empresas. Solo Cellnex Suiza está compartida con otros socios. Lo importante es tener una estructura de capital flexible. Sin ninguna duda, podríamos hacer frente.
¿Hay una preferencia por seguir creciendo en mercados en los que ya se ha desembarcado y se es líder o sería preferible abrirse a nuevas geografías?
Priorizamos las oportunidades en todos nuestros mercados actuales porque más crecimiento de ebitda podremos dar. Ahora, hay mercados adyacentes como Portugal, que es un mercado interesante. Están Alemania, Irlanda, Austria, Bélgica... donde dar el salto tampoco nos costaría tanto.
¿Hay alguna operación que esté avanzada y pueda cerrarse a corto o medio plazo?
Siempre. Tiene que haberlo. Si no, nosotros no seríamos Cellnex. Somos como una cocina y vamos preparando platos para hacerlos en el momento, otros intermedios y otros que tardan más...
En el contexto actual del mercado parece que la situación complicada de las ‘telecos’ puede ser un punto a favor. Pero, por otro lado, también hay más competencia del capital privado. En 2018 se habló de que Cellnex se perdió las grandes operaciones. ¿Se está encareciendo cerrar acuerdos?
El año pasado comprometimos 800 millones. La sensación que da es que hay poca actividad, pero no te puedes imaginar lo que cuesta firmar acuerdos. Me cuesta creer que el capital privado pueda negociar punto por punto en menos tiempo y me cuesta creer que esté mejor posicionado salvo que se juegue a puramente financiar. Me cuesta mucho pensar que el capital privado sea el óptimo para esta industria porque se requiere un know how industrial único.
Simplemente con las operaciones que hay ya cerradas, ¿qué ritmo de crecimiento orgánico puede alcanzar Cellnex?
Con el perímetro actual que tenemos y la contractualizacion de torres futuras nos movemos entre el 5 y el 10 por ciento al año, como pasó en 2018 cuando no ejecutamos ninguna operación de M&A. No solo se genera ebitda con las compras, también se puede lograr aumentarlo actuando sobre los costes.
Otro de los vectores de crecimiento es el 5G. ¿En qué momento puede trasladarse esta apuesta a la cuenta de resultados?
Es muy difícil saberlo, porque para eso necesitas un modelo de funcionamiento que todavía no hay y por lo tanto no lo podemos cuantificar. Lo que hemos hecho ha sido poner el 4.5G. Estamos creciendo en ese segmento casi un 20 por ciento. Yo no veo que poda