El Economista - Ecobolsa

Si vuelve el miedo, el inversor se juega perder un 5% con la renta fija europea

- AÚN HAY RIESGO DE CAÍDAS Por Víctor Blanco Moro

Tras la reacción de emergencia del Banco Central Europeo la deuda soberana de los países de la zona euro se ha relajado. Sin embargo, hay expertos que avisan del peligro que todavía acecha

La última semana ha sido una montaña rusa para los principale­s títulos de deuda soberana de la eurozona. Después del tropiezo de Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE) en la reunión del 12 de marzo, al señalar que no era responsabi­lidad del organismo “reducir los diferencia­les de la deuda de los países”, los principale­s bonos públicos de la región se tensionaro­n con rapidez. Las primas de riesgo en las principale­s economías de la zona euro se ampliaron rápidament­e, hasta los 160 puntos en el caso de España, por el temor de que el nuevo BCE de Lagarde iba a ponerse de perfil en la labor, que durante los años de Draghi ha sido una constante (con la excepción de Grecia), de mantener, de alguna forma, una cierta mutualizac­ión de la deuda de los países con los programas de estímulo. La sombra de la crisis de deuda de 2012 parecía que estaba volviendo a ceñirse sobre Europa.

El plan de emergencia que ha lanzado esta semana el BCE ha cambiado todo y ha sido suficiente para que las aguas vuelvan a estar en calma, con los inversores volviendo a confiar en que el BCE estará ahí para mantener unida a Europa, al menos en términos de coste de financiaci­ón, y han regresado a la renta fija de estos países, reduciendo así las primas de riesgo. Sin embargo, la crisis del coronaviru­s sigue siendo una amenaza mayúscula para la economía de la región y aunque los países están tomando medidas y aumentando un gasto que parece que, al menos durante un tiempo considerab­le, estará cubierto por el plan del BCE, hay expertos que avisan del riesgo de que los bonos sufran pérdidas. Si estos volviesen a los máximos que se han visto en los últimos 12 meses las pérdidas, de media en los principale­s soberanos, serían del entorno del 5%.

Deuda alemana, ¿en positivo?

Markus Allenspach, responsabl­e de investigac­ión de renta fija en el banco suizo Julius Baer, considera que en Europa se han vivido “años de políticas fiscales restrictiv­as tras la crisis de 2012” y cree que “el mercado de bonos debe encontrar un nuevo equilibrio entre los anuncios de nuevas medidas de estímulo fiscal, muy prominente­s en España, pero también en Alemania y Francia”, y las políticas del BCE. El aumento del gasto en la primera economía de la zona euro lleva a pensar al experto que, “mirando hacia el futuro, las rentabilid­ades de los bonos soberanos alemanes vuelvan a ser positivas en la mayor parte de vencimient­os”, lo que hace que ahora prefieran fijarse en “los bonos corporativ­os de menor calificaci­ón frente a los soberanos”. Si el bono alemán regresa al 0% de rentabilid­ad, como cree Julius Baer, esto dejaría pérdidas de más del 3%, aproximada­mente, para el inversor desde el entorno del -0,3% en el que cotiza ahora.

Caídas más fuertes en la periferia

El riesgo de pérdidas no sólo se aplica en los bonos de Alemania. Hay otros factores a tener en cuenta para analizar la renta fija soberana en este momento. Uno de ellos es la capacidad que puedan tener los países de la zona euro de encarar las deudas que asuman ahora en la lucha contra el coronaviru­s. Desde Allianz GI reconocen cómo el mercado ha comprado el mensaje de Lagarde y su plan de choque, pero avisan de que se debe “mantener la cautela de cara a un mayor aumento de los diferencia­les, especialme­nte en Italia, el eterno eslabón débil de la zona euro. El anuncio del BCE es cierto que provee seguridad para la zona euro y facilita el acceso a los mercados para los países periférico­s, pero los inversores también podrían mirar más a largo plazo, en particular, a la solvencia de los países implicados”. Mientras el bono alemán mira al 0%, que se tocó por última vez en mayo de 2019, y es prácticame­nte el punto más alto en rentabilid­ad que se ha visto en los últimos 12 meses (lo fue el 0,08%), las pérdidas que podrían verse en el resto de títulos hasta alcanzar los máximos que se han dado en el último año es mayor. En el caso de los títulos españoles, portuguese­s y griegos con vencimient­o a 10 años, tres bonos cuyos máximos se han visto en los últimos días, las caídas hasta estos niveles dejarían pérdidas superiores al 4% en los españoles y del 4,3% en los portuguese­s y de más del 8% en los griegos, que están experiment­ando volatilida­des todavía mayores.

Con el título italiano, cuyos máximos de rentabilid­ad los últimos 12 meses se produjeron en mayo de 2019, las pérdidas alcanzaría­n el 9,5%, mientras que en los franceses volver al nivel más alto de rentabilid­ad supondría una caída en precio cercana al 2,4%.

 ?? Fuente: Bloomberg. ISTOCK ??
Fuente: Bloomberg. ISTOCK

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain