El Economista - elEconomista Pensiones
IKER BARRICAT
DIRECTOR GENERAL DE ADECCO ESPAÑA
El mercado laboral se encuentra en constante transformación, lo que presenta un elemento de incertidumbre para los más jóvenes sobre el trabajo a desempeñar y el nivel de vida presente y futuro que puede aportar al empleado. Sobre estas cuestiones de fondo, el director general de Adecco España, Iker Barricat, apunta la tendencia adoptada, plenamente inmerso en el lanzamiento del proyecto CEO por un mes que impulsa su compañía.
¿La oferta formativa de España se encuentra en sintonía con los perfiles que demanda el mercado laboral?
Definitivamente no. Aunque hemos avanzado en tratar de cerrar la brecha que históricamente ha existido entre los perfiles que produce nuestro sistema educativo y las necesidades que tienen las empresas todavía no hemos llegado a los niveles deseables. A día de hoy, pese a las altas tasas de desempleo juvenil, las empresas declaran que siguen teniendo serias dificultades para cubrir determinados perfiles.
¿Son ciertos los problemas para cubrir mano de obra menos cualificada en algunas regiones del país?
Sí, de hecho, más del 60 por ciento de las empresas tienen problemas para cubrir sus ofertas de empleo, y esto afecta a sectores diversos. La tasa de paro de los jóvenes está por encima del 35 por ciento, pero sectores como la hostelería, la industria o la construcción demandan titulados de grados medio o superior en sus diversas especialidades, y nuestro modelo de formación profesional es incapaz de responder a la alta demanda de estos profesionales. Es necesario que tomemos medidas que nos ayuden a aproximar oferta y demanda de empleo.
¿Se necesitan subir los salarios en el país? El Gobierno lo ve como una receta para poder pagar pensiones.
Desde luego. La crisis que sufrimos en el año 2008 no solo tuvo un efecto devastador sobre el empleo con la destrucción de millones de puestos de trabajo sino además implicó una pérdida importante del poder adquisitivo de los salarios. Afortunadamente, durante estos años hemos podido recuperar una parte importante del empleo destruido, sin embargo, la evolución de los salarios no ha sido tan positiva. Tenemos que avanzar en subir los salarios, si bien debe venir acompañado de otras medidas que permitan mantener la competitividad empresarial.
“Hay que subir los salarios sin dañar
la competitividad empresarial”