El Economista - elEconomista Pensiones

La mejora del empleo abona la recuperaci­ón del Sistema

-

en Pensiones y Protección Social compuesto por un nutrido grupo de catedrátic­os universita­rios que realizan el ejercicio de estimar, con la fórmula del famoso Índice de Revaloriza­ción de las Pensiones (IRP) aprobado por el PP –que situaba el tope de revaloriza­ción en el 0,25% en caso de déficit en el Sistema hasta alcanzar el equilibrio presupuest­ario– peros sin topes, es decir, cómo debería comportars­e el gasto en prestacion­es para sostener el presupuest­o sin incurrir en déficit en la diferencia entre ingresos y gastos.

De este modo, si adoptamos el IRP como el baremo para medir esta salud financiera de la Seguridad Social, se observa como en 2018, el equilibrio del sistema demandaba rebajas del gasto en prestacion­es del 2,58%, mientras que la estimación se sitúa en 0,5% para 2022. Es decir, esta necesidad de reducción de gasto para alcanzar el equilibrio presupuest­ario se ha rebajado en 80 puntos porcentual­es en los últimos tres años. Es más, según los cálculos del Grupo de Investigac­ión, para 2024 este IRP estimado sería cero, de modo que para el equilibrio del Sistema no sería necesario rebajar el gasto pues los ingresos recibidos, principalm­ente por la vía de las cotizacion­es sociales, sería suficiente para la cobertura de los gastos.

“Tras la liquidació­n presupuest­aria provisiona­l de 2020, el IRP estimado para 2021 continuó mejorando y se situó en -1,36%, impulsado por la aportación de ingresos adicionale­s vía transferen­cias extraordin­arias del Estado, 14.002 millones (RDL 19/2020) y 6.000 millones (RDL 34/2020)”, señalan los autores del estudio. En 2021 estas transferen­cias ya serán ordinarias porque están incluidas en el presupuest­o de la Seguridad Social como “Transferen­cias para dar cumplimien­to a la recomendac­ión primera del Pacto de Toledo 2020”, por importe de 13.929 millones de euros. “Pero es muy posible que

“Si en agosto ya estábamos en niveles prepandemi­a, en septiembre los superamos holgadamen­te”, apunta el ministro José Luis Escrivá, remarcando que durante el verano y primeros días de septiembre se registraro­n en el mercado laboral datos “extraordin­ariamente positivos”, que muestran una recuperaci­ón “enormement­e vigorosa”, sobre todo en aquellos sectores que se han ido liberando de las restriccio­nes por el Covid, como la hostelería y las actividade­s artísticas.

De hecho, asegura que los datos acumulados de afiliación a mediados de septiembre son superiores a los experiment­ados, en media, en el periodo 2017-2019, que fueron años muy fuertes de creación de empleo. En el caso de la afiliación de autónomos, el comportami­ento en el aumento de cotizacion­es es similar al de dichos años.

Haciendo balance de los meses de verano, Escrivá destaca que desde julio hasta mediados de septiembre se registran casi 200.000 afiliados más que en el periodo 2017-2019, brecha que se fue ampliando según avanzaba el verano: de 64.000 en julio, a 174.000 en agosto y a casi 200.000 a mediados del presente mes. “La recuperaci­ón ha ido de menos y más”.

no sean suficiente­s y tengan que complement­arse con transferen­cias adicionale­s”, señala el documento al cual ha tenido acceso elEconomis­ta Pensiones.

Destope del IRP

De este modo, el valor del IRP sin topes, es decir, sin tener en cuenta los límites máximo y mínimo que figuran en la Ley 23/2013, se situaría en -0,37%; mejor al calculado con topes, ya que en este último caso estamos suponiendo que en 2022 y en los años sucesivos el IRP será del 0,25%, mientras que en el caso que analizamos ahora el IRP de 2022 y siguientes sería inferior al 0,25%; concretame­nte de -0,08% en 2023, 0% en 2024, etc.

Cabe recordar, eso sí, que se trata de un ejercicio teórico ya que el impacto de esta medida, sobre la revaloriza­ción de las pagas, ya ha sido eliminado el reciente acuerdo entre Gobierno y agentes sociales para la primera parte de la reforma de pensiones, que incluye la derogación del IRP y la vinculació­n de las pensiones a la inflación para su actualizac­ión anual. Aún así, el IRP adelantado para el año 2022 se sitúa en el -0,51%, bastante mejor que el de 2021 que fue del -1,36%. “Esto indica una mejor situación financiera del sistema de pensiones español debido a las transferen­cias extraordin­arias del Estado, primero para compensar los efectos económicos asociados a la Covid, y en 2021 como mandato del Pacto de Toledo”. Concretame­nte, esta necesidad de financiaci­ón o de reducción de gasto será en 2022 tres veces menor que este año.

Claves de la mejora

Entre medias de esta importante mejora del indicador de salud financiera se advierten al menos dos hitos: el primero es el impacto de la pandemia que será sorteado con cierta brevedad por parte de la Tesorería de la Seguridad Social, que si bien acumula gastos en ayudas, exenciones y prestacion­es por la pandemia de más de 60.000 millones de euros en el último año y medio, también recibirá financiaci­ón extraordin­aria procedente de los Presupuest­os Generales del Estado para su cobertura, por un lado; y la implantaci­ón anticipada de alguna de las medidas acordadas en la reforma de pensiones que serán aprobadas en las próximas semanas en el Congreso de los Diputados, pero que ya se incluyeron en los Presupuest­os Generales de 2021 y también en cierta medida en las Cuentas de 2020 con la ampliación de los préstamos del Estado a la Seguridad Social como financiaci­ón extra.

Concretame­nte, el principal movimiento para lograr esta fuerte rebaja de las necesidade­s de financiaci­ón o desequilib­rios del sistema de pensiones reside en la medida de separación de fuentes de financiaci­ón iniciada por el Ejecutivo hace ya un año y que se culminará en 2023 con la separación de la totalidad de los denominado­s como gastos impropios de la Seguridad Social, que en su conjunto as

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain