CONTRA LOS DETRACTORES DEL COCHE ELÉCTRICO

Con la llegada del coche eléctrico cada vez hay más detractores de esta tecnología. La mayoría, aficionados al motor

El sonido de un motor V8 puede ser una sinfonía para muchos, y el sonido de un motor eléctrico -una especie de zumbido- una pesadilla. Debido a este motivo, muchos de estos entusiastas de los vehículos de combustión, junto a muchos otros sectores como el del petróleo, energía y demás, se plantean algunas cuestiones sobre si realmente el coche eléctrico es la salvación y el coche de combustión el demonio, o si esa situación es mentira.

Como todo en esta vida, esto tiene distintos puntos de vista, y las cosas no son ni blancas ni negras. Un coche eléctrico puede contaminar más que un coche de combustión interna teniendo en cuenta muchos factores, o puede ser lo totalmente opuesto. El problema es que muchos de esos factores que influyen en cuánto contamina un coche eléctrico escapan a nuestro control o a lo que podemos elegir.

A vueltas con la contaminación

Una de las maneras de contabilizar la contaminación es lo que se conoce como del pozo a la rueda, que viene a ser tener en cuenta toda la cadena energética involucrada en el combustible utilizado. Por ejemplo, en el caso de la gasolina, sería el montar la plataforma petrolífera, la extracción, la refinería, el transporte y, finalmente, su uso. En el caso del coche eléctrico sería el contar de cómo se genera esa electricidad -si es carbón, lo que contamina extraerlo, transportarlo y quemarlo, por ejemplo. Si es otra fuente, lo que corresponda- hasta su uso en el vehículo.

Pero a esto hay que añadir lo que contamina generar un vehículo, la extracción de las materias primas, etc. Como pueden imaginar, hay muchos factores para tener en cuenta, algunos de ellos muy variables, que hacen que comparar sea muy difícil. Lo que sí es cierto es que fabricar baterías es un proceso contaminante que poco a poco se está solucionando -como por ejemplo las gigafactorías de Tesla, que funcionan mediante energías renovables-, y que, si no se reciclan, generan muchos residuos.

El ‘mix’ energético es la clave

También es muy importante el mix energético de cada país. No es lo mismo cargar un vehículo eléctrico en España que en Francia, y esto es algo que, como usuario, no podemos controlar -al menos de momento-. Por ejemplo, en Francia alrededor del 70 por ciento de la energía se genera mediante centrales nucleares. Los productos radiactivos