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Repsol alcanzará los 4 millones de clientes de luz y gas en 2027
La compañía, que acaba de poner en marcha la planta de biocombustibles avanzados de Cartagena, destinará más del 35% de las inversiones a iniciativas bajas en carbono.
Cumplir, con dos años de antelación, gran parte de los objetivos proyectados en el Plan Estratégico 2021-2025, ha permitido a Repsol actualizar su estrategia hasta 2027, que presentó el pasado 22 de febrero en su sede en Madrid. La nueva hoja de ruta, con la que la compañía espera reforzar su crecimiento, consolidar su apuesta multienergética y alcanzar las cero emisiones netas en 2050, prioriza la retribución a los accionistas, fija un nivel de inversión superior a la media de los últimos años y mantiene su fortaleza financiera.
Respecto al primer punto, Repsol destinará entre el 25% y el 35% del flujo de caja de las operaciones a retribuir a sus más de 520.000 accionistas, pudiendo llegar a distribuir hasta un máximo de 10.000 millones de euros: 4.600 millones en dividendo en efectivo y hasta 5.400 millones en recompras de acciones. Para 2024, la compañía ha anunciado un incremento de, aproximadamente, un 30% del dividendo en efectivo, hasta 0,9 euros por acción, repartiendo 1.095 millones. Para los siguientes tres años, el compromiso es incrementar un 3% anual esta cantidad, hasta los 1.197 millones en 2027.
En materia de inversiones, Repsol destinará entre 16.000 y 19.000 millones netos en los próximos cuatro años: el 60% en la Península Ibérica y el 25% en Estados Unidos. Por su parte, las iniciativas bajas en carbono representarán más del 35%. Para 2024, la inversión neta prevista se sitúa en unos 5.000 millones de euros.
Una de las claves de la estrategia de descarbonización de la compañía se encuentra en la evolución de su negocio industrial, compuesto por siete instalaciones –seis de ellas en la Península Ibérica–
con la previsión de invertir entre 5.500 y 6.800 millones netos hasta 2027 para mantener a la vanguardia dichas instalaciones y desarrollar productos de bajas emisiones como combustibles renovables, hidrógeno renovable y biometano.
Dichas inversiones, afirmó Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol, “estarán condicionadas a la evolución del marco regulatorio y fiscal en España”. El directivo dijo “haber mantenido siempre un diálogo abierto con las instituciones” y confía “en que el gravamen a las energéticas se reformulará”, tal y como ha manifestado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya que “no es lógico primar al que produce fuera de España en lugar de al que invierte y crea empleo industrial en el país”, señaló Imaz. El CEO también aprovechó para pedir “que no se baje la ambición de descarbonización, sino que la transición sea más inteligente y esté basada en las capacidades industriales y tecnológicas, así como en las fortalezas de la economía”.
La compañía comercializará combustibles renovables en 1.900 de sus gasolineras en 2027
El objetivo de Repsol es alcanzar una capacidad total de producción de combustibles renovables –incluyendo hidrógeno renovable y biometano– de entre 1,5 y 1,7 millones de toneladas en 2027 y hasta 2,7 millones en 2030 en la Península Ibérica y Estados Unidos. Este mes de febrero, la compañía ha puesto en marcha la planta de biocombustibles avanzados de Cartagena, a la que se sumará una segunda en Puertollano en 2025, con la intención de replicar este modelo en un tercer centro industrial en España antes de 2030. En el caso del hidrógeno, la compañía prevé alcanzar una producción de hasta 700 MW en 2027 y un máximo de 2.400 MW en 2030. En 2023, puso en marcha su primer electrolizador de 2,5 MW en su refinería de Petronor (Vizcaya) e instalará electrolizadores en sus cinco centros industriales en España.
Luz y gas, EESS y generación baja en carbono
Repsol también se ha comprometido a invertir más de 2.000 millones de euros en la comercialización de electricidad y gas, movilidad eléctrica, eficiencia energética y generación distribuida. Uno de sus objetivos pasa por duplicar su base de clientes de electricidad y gas hasta los cuatro millones en 2027, a la vez que seguirá impulsando Waylet, su aplicación digital de fidelización de clientes, que superará los 10 millones de usuarios en la misma fecha.
La compañía seguirá expandiendo su red de estaciones de servicio, ampliando el negocio non-oil y finalizando 2027 con la comercialización de combustibles renovables en 1.900 de sus gasolineras, pasando de los 60 puntos de venta actuales a su
perar los 600 a finales de 2024. Un 60% de las estaciones de servicio Repsol serán multienergía, con combustibles renovables, puntos de recarga rápida o ultrarrápida de electricidad y AutoGas, junto a productos convencionales. La compañía también aspira a liderar el mercado de combustible sostenible de aviación (SAF) en la Península.
Otro de los pilares para la transición energética de la compañía es la generación renovable de electricidad. Repsol, que actualmente cuenta con más de 2.800 MW instalados en España, Estados Unidos, Chile, Italia y Portugal y una cartera de proyectos de 60.000 MW, invertirá entre 3.000 y 4.000 millones netos para desarrollar su cartera de proyectos y alcanzar 9.000 MW-10.000 MW de capacidad instalada en 2027. El 50% estará en la Península Ibérica y un 30% en Estados Unidos tras consolidar el pipeline de Hecate y de Connect-Gen. La compañía prevé ampliar su presencia en Chile e Italia, con una capacidad instalada conjunta de 1.500 MW en 2027.
Respecto al negocio de Exploración y Producción (Upstream), la compañía mantendrá el foco estratégico en la generación de valor y la descarbonización de sus operaciones. Pondrá en marcha nuevos proyectos en áreas donde cuenta con ventajas competitivas, como Estados Unidos, Brasil y México, ante su potencial salida a bolsa al final del periodo. La unidad de negocio aumentará un 30% la caja generada por barril producido hasta 2027, apoyándose en la entrada en producción en 2025 del proyecto Leon-Castille en el Golfo de México y del proyecto Pikka en Alaska en 2026. Asimismo, disminuirá un 33% la intensidad de carbono de sus activos en los cuatro próximos años gracias a las medidas de eficiencia.