El Economista - Franquicias y Emprendedores
La fórmula perfecta: emprendimiento y franquicia
Alas ventajas tradicionales que siempre ha tenido el modelo de negocio de Franquicia hay que añadir ahora la necesidad de emprender en un país como el nuestro que tiene la medalla de oro en paro juvenil. Si a esto le añadimos el gran nivel de incertidumbre actual y lo difícil que resulta para los jóvenes encontrar trabajo y lo mismo para las empresas encontrar talento para contratar, una contradicción enorme ya anclada en nuestra economía y que origina grandes problemas de competitividad, la solución sería que hubiese muchos emprendedores y que la creación de empresas a través de autónomos que monten su propio negocio se dispare, pero esto tampoco tiene las condiciones necesarias que debería para facilitarlo.
Tampoco el sistema educativo ayuda ni lo que los jóvenes ven como ejemplo, ya que ahora los adolescentes piensan en ser youtubers y cosas así, en resumen, la búsqueda del éxito inmediato a través de atajos que acaban siendo muchas veces espejismos.
La solución sería promover el espíritu emprendedor en los jóvenes y algo de eso se empieza a mover -aunque vamos con retraso importante- y que la legislación fuese mucho más favorable a la hora de crear una nueva empresa y esto parece muy lejano.
Dentro de las posibilidades de emprender y elegir el modelo de negocio ideal tenemos al sistema de Franquicia como uno de los posibles candidatos a tener en cuenta.
Si precisamente cuando alguien joven empieza su andadura empresarial carece de experiencia una de las grandes ventajas de la franquicia es que te van a dar empaquetado una serie de ventajas que te impulsarán con tu negocio como son:
1. Una formación adecuada para empezar desde el minuto uno a generar valor en el nuevo negocio.
2. Un buen plan de negocio con un estudio de mercado profesional y concreto que contiene los procedimientos que debes seguir para aplicar una fórmula que ya se ha experimentado y ha funcionado con éxito antes, es decir ya no necesitas arriesgarte tu.
3. Unas actualizaciones constantes en conocimientos y cambios en el mercado y las posibles soluciones para adaptarnos a ellos con la experiencia de la central franquiciadora que además si lleva tiempo en el mercado es porque sabe adaptarse y también porque una eficiente central franquiciadora sabe recoger las propuestas constructivas de todos sus franquiciados y usarlas para la mejora constante.
4. Normalmente un nuevo emprendedor nunca domina todas las facetas necesarias para llevar adelante un nuevo proyecto ya que habrá estudiado cuestiones concretas pero no le ha dado tiempo a prepararse en todas las áreas necesarias, pero una buena central franquiciadora puede dar el apoyo en todas las áreas, sean competencias financieras, competencias profesionales del sector en el que se va a operar, competencias sociales para unas buenas relaciones y contactos en el mercado, competencias administrativas como gestión del tiempo y los recursos y ahora hay que añadir las competencias digitales.