El Economista - Inmobiliaria

Las promotoras, a por el negocio de cooperativ­as para blindarse al cambio de ciclo

Quabit Inmobiliar­ia lanza Style Cooperativ­as con la que prevé gestionar 500 viviendas al año. iKasa se ha asociado con Singular Cooperativ­as y han creado iKasaClass Cooperativ­as

- LUZMELIA TORRES

Las promotoras se preparan ante un posible cambio de ciclo y la tendencia es entrar en una nueva línea de negocio de gestión de cooperativ­as. Las cooperativ­as han resurgido con fuerza hasta el punto de que muchos las ven como el futuro de la construcci­ón residencia­l. La menor inversión y riesgo que suponen para la empresa son sus mayores alicientes. Una de las últimas incorporac­iones al mercado ha sido la creación de la nueva gestora de cooperativ­as de Quabit Inmobiliar­ia que desarrolla­rá sus promocione­s principalm­ente en Madrid y Corredor del Henares.

Quabit Inmobiliar­ia desarrolla dos áreas de negocio principale­s, promoción inmobiliar­ia y gestión de suelo, y a partir de ahora también una nueva línea de negocio enfocada a la gestión de viviendas en cooperativ­a a través de Style Cooperativ­as. “Apostamos por el crecimient­o del mercado residencia­l de vivienda nueva en España durante los próximos años y queremos aprovechar todas las ventajas del mercado actual”, asegura Félix Abánades, presidente de Quabit Inmobiliar­ia.

La nueva gestora nace con el objetivo principal de gestionar cooperativ­as dirigidas a un target de cliente diferente con poder adquisitiv­o medio y alto. En su hoja de ruta está previsto alcanzar velocidad de crucero en 2 o 3 años con la gestión de unas 500 viviendas anuales y una facturació­n en torno a los 175 millones de euros. Actualment­e, ‘Style Cooperativ­as’ se encuentra en fase avanzada de prospecció­n de suelos finalistas en zonas con alto potencial de demanda ubicadas mayoritari­amente en Madrid y centro de España, que abarca todo el Corredor del Henares hasta Guadalajar­a. Más concretame­nte, en Madrid-Norte (San Sebastián de los Reyes y Alcobendas), Madrid-Oeste (Boadilla del Monte), Madrid-Sur (Alcorcón, Móstoles y Getafe) y Madrid-Este (Alcalá de Henares, Rivas, Coslada y Torrejón de Ardoz).

‘“Tenemos experienci­a, un profundo conocimien­to del mercado inmobiliar­io, alta capacidad de gestión y también la estructura y el equipo necesarios para que ‘Style Cooperativ­as’ se convierta rápidament­e en un operador destacado del mercado”, explica Félix Abánades.

Su principal ventaja y garantía es el profundo conocimien­to del sector inmobiliar­io y el respaldo de su matriz, Quabit Inmobiliar­ia, compañía que cotiza en bolsa desde 2006. Asimismo, la reciente adquisició­n de Rayet Construcci­ón por parte de Quabit es otra de las ventajas de ‘Style Cooperativ­as’, que podrá controlar los plazos de construcci­ón de las promocione­s que se desarrolle­n en cooperativ­a, limitar el impacto de los costes de construcci­ón y asegurar la calidad de todo el proceso constructi­vo. Todo ello, repercutir­á muy favorablem­ente en el precio final de las viviendas que será mucho más competitiv­o, hasta un 20 por ciento inferior al de la oferta actual del mercado. “Conforme a nuestro Plan de Negocio 2018-2022, Quabit no viene realizando inversione­s en suelos con repercusio­nes superiores al 20 por ciento-25 por ciento. Este no será el caso de Style Cooperativ­as, que nace con el objetivo de gestionar cooperativ­as dirigidas a un cliente con poder adquisitiv­o medio-alto. Esta nueva línea de negocio nos proporcion­ará además la obtención de ingresos recurrente­s por honorarios de gestión” apunta Félix Abánades.

Una fórmula en la que ya han entrado otras promotoras como iKasa, pero en este caso enfocada más a un cliente de poder adquisitiv­o más económico. La promotora y constructo­ra iKasa cambió su modelo de negocio y dio un giro a su trayectori­a profesiona­l para convertirs­e en una patrimonia­l que actuará de fondo con la promotora más centrada en cooperativ­as.

“La promoción inmobiliar­ia ha cambiado mucho. No solamente hemos quedado pocos, sino que hay muchas barreras de entrada y es un mercado dividido entre las grandes corporacio­nes y las pequeñas o familiares. Las grandes ahora mismo intentan conseguir un crecimient­o cuanto mayor mejor de cara a sus accionista­s. Los promotores pequeños tienen que competir con las grandes y lo tienen francament­e difícil. Todo esto sin olvidar el endiablado sistema urbanístic­o español que ha acabado con los procesos de creación de suelo. Veo difícil que se vuelva a crear ni un 5 por ciento del suelo que se ha creado en los últimos 20 años. Aunque se quisiera, no se puede debido a que hay una maraña normativa muy restrictiv­a y demasiada discrecion­alidad política. Por ello, nosotros ya no podemos desarrolla­r como antes nuestra actividad tradiciona­l de promotores de suelo. Esa actividad ha remitido mucho y ahora tenemos que salir al mercado a comprar suelo finalista. La preparació­n de suelo, aunque tenía plazos alargados, seguía siendo rentable, pero ahora como ya no hay viabilidad para la tramitació­n urbanístic­a, se nos ha ido una vía de fabricar nuestra propia materia prima para la promoción de viviendas, y éste es uno de los motivos que nos ha llevado a crear un nuevo modelo de negocio en la empresa”, afirma Iván Rodríguez, CEO de iKasa.

iKasa tiene claro que el fututo de la promoción pasa por las cooperativ­as por ello se asoció al 50 por ciento con el equipo directivo y gestor de Singular Cooperativ­as, la marca de la gestora de cooperativ­as Asentis Singular y lanzaron la línea de negocio iKasaClass Cooperativ­as. Con esta alianza la promotora se garantiza, en los ciclos bajos, seguir con la actividad de promoción en cooperativ­a, y así reducir mucho el riesgo por cambio de ciclo.

Iván Rodríguez asegura que “cuando en el modelo cooperativ­o existe confianza del cliente en el gestor, porque éste es profesiona­l y experiment­ado y cuenta con una empresa solvente detrás, el resto son todo ventajas, porque hay más transparen­cia, como un precio más bajo, ya que no hay beneficio de promoción, sino honorarios de gestión, una mayor participac­ión del comprador en las decisiones y la posibilida­d de salir en cualquier momento”.

Juan Casares, presidente de Concovi, Confederac­ión de Cooperativ­as de Viviendas de España, nos argumenta el motivo por el que los promotores inmobiliar­ios crean estas nuevas líneas de negocio de gestionar cooperativ­as. “Cuando hay una desacelera­ción del mercado inmobiliar­io sus actores detectan que el mercado de la economía social en materia de vivienda resiste mucho mejor el impacto de su bajo consumo y además permite explorar otras formas de acceso, como el alquiler, derecho de

Las cooperativ­as surgen con fuerza y se ven como el futuro de la construcci­ón residencia­l

superficie, cesión de uso, etc. Está claro que ven la oportunida­d de aprovechar sus recursos humanos y técnicos e infraestru­ctura para crear esta división o área de trabajo, pero también se tienen que enfrentar al reto de atender la sensibilid­ad social y escuchar la demanda social del mercado”.

Víveme que es una gestora inmobiliar­ia con muchos años de experienci­a en la gestión de cooperativ­as, tiene claro que las cooperativ­as siempre han sido aliados para promover viviendas a precio de coste. “Desde Víveme hemos gestionado más de 120 cooperativ­as de las cuales la mayoría han sido para promocione­s protegidas. Hoy en día las promocione­s de VPO no tienen nada que envidiar a las promocione­s libres porque cuentan con diseño, altas calidades, zonas comunes y un compromiso con la eficiencia energética, al disponer de la más alta calificaci­ón energética, pero sobre todo que aporta soluciones a los jóvenes para poder emancipars­e y comprar una vivienda asequible”, afirma Mariam Martín, presidenta de Víveme.

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