El Economista - Inversion a Fondo
Viaje sin igual a las finanzas con una de las mentes más brillantes del siglo XX
El mundo inversor ha crecido en sofisticación analítica en las últimas décadas. Mientras que hasta aproximadamente 1950 la mayoría de los participantes en los mercados tenían algún rudimento matemático y ninguna formación en concreto, desde entonces, profesionales del mundo de las matemáticas y de la física, ayudados por el crecimiento del poder computacional -y asequibilidad- de los ordenadores, se fueron abriendo paso en Wall Street, poniendo sus habilidades a disposición de una industria cada vez más competitiva. Uno de estos quants pioneros fue Edward Thorp, que no solo revolucionó el mundo de la inversión sino las matemáticas de varios juegos de azar.
Por primera vez, Thorp comparte en detalle su fascinante trayectoria vital en su último libro, una autobiografía llamada A Man for All Markets: Beating the Odds, from Las Vegas to Wall Street, diferente de sus dos anteriores -y mundialmente aclamados- libros Beat the Dealer -publicado en 1962- y Beat the Market (1967). En ellos, Thorp abordaba de manera analítica sus innovadores sistemas matemáticos para ganar, respectivamente, en el blackjack y en los mercados financieros consistentemente. Relata cómo, viniendo de una familia humilde durante la Gran Depresión, fue capaz de idear sistemas para ganar en el blackjack, en la ruleta, de inventar el primer wearable que se conoce en la historia, de innovar en el arbitraje de derivados y, de paso, conocer por el camino a algunas de las personalidades más influyentes del siglo XX, como Richard Feynman, Claude Shannon, Fischer Black y Warren Buffett.
En el corazón de las estrategias de Thorp, tanto en los casinos como en la inversión, reside la idea de que el tamaño de las apuestas debe estar ligado a la probabilidad de éxito. Solo en aquellas apuestas en las que la probabilidad de ganancia es elevada tiene sentido apostar una elevada cantidad. No es de extrañar que, en las inversiones, donde las probabilidades son difusas, Thorp se dedicase al arbitraje -principalmente de bonos convertibles-, pues es donde dichas probabilidades están más acotadas. Sus resultados fueron demoledores. Desde la fundación de Princeton Newport Partners en 1969 hasta su cierre en 1988, Thorp obtuvo un rendimiento anualizado del 15,1 por ciento -frente al 10 por ciento del S&P500-, ¡y sin tener además ningún año negativo!
Además, Thorp hace un repaso a cómo ha cambiado el mundo de las finanzas en las últimas décadas, desde fraudes tipo Madoff -que él identificó ya a principios de los 90- y la implosión de Long Term Capital Management hasta la importancia de los fondos indexados. A Man for All Markets es un viaje sin igual contado por una de las mentes más brillantes del siglo XX. El libro no solo es la historia de éxito de un gestor pionero en su campo, sino también del triunfo de la constante curiosidad y de un pensamiento analítico superior. Javier López Bernardo, Ph. D., CFA, miembro de CFA Society Spain
“THORP COMPARTE SUS MÉTODOS PARA GANAR EN EL ‘BLACKJACK’ Y EN EL MERCADO”